El mediocampista del seleccionado de fútbol Juan Sebastián Verón, quien no hablaba con la prensa argentina desde Francia 1998, dijo ayer que retomó el diálogo con el periodismo porque "el país está pasando un momento difícil y la gente necesita saber lo que sentimos en este momento de alegría", en referencia a la clasificación alcanzada ayer en Ecuador para el Mundial de 2002.
"La gente está pendiente de nosotros y por eso es bueno darle una mano contándole nuestros sentimientos", indicó Verón a en el aeropuerto de Ezeiza, minutos antes de bordar un avión con destino a Londres para reincorporarse a su nuevo equipo Manchester United.
El último contacto que tuvo la Brujita con periodistas argentinos data del 6 de junio de 1998 en L'Etrat, el bucólico pueblito francés situado en la región de Saint Etienne, donde el seleccionado nacional permaneció concentrado para la primera fase del Mundial de ese año.
Ese día Verón se quejó de sus connacionales hombres de prensa por la difusión de una información que lo involucraba en un doping positivo comprobado durante un control interno realizado en el predio de AFA, pocos antes de que el conjunto dirigido entonces por Daniel Passarella viajara a Francia.
"No sé por qué siempre se la toman conmigo", dijo en ese momento, acompañando el reclamo con la característica fiereza de su gesto. Desde entonces, sus palabras solamente fueron para los periodistas italianos y, hace cinco meses, "para Latinoamérica", según aclaró, en una entrevista especial con la cadena Fox.
Pasaron 1.167 días desde que Verón se plantó por última vez ante micrófonos, grabadores y libretas portadas por periodistas que, más allá de las críticas, sintonizaban una frecuencia parecida a la suya respecto de lo argentino, y ayer, después de tanto tiempo transcurrido, decidió unilateralmente volver a hacerlo porque, según manifestó, "el país lo necesita".
El también ex mediocampista de Estudiantes, Boca, Sampdoria, Parma y Lazio aclaró en su "reconciliación con la prensa argentina" que aceptaba la crítica, "porque es buena, siempre y cuando sea constructiva, se trate de temas futbolísticos y no pase por otro lado".
Con respecto a la clasificación lograda por el seleccionado nacional para el Mundial que se jugará el año próximo en Corea y Japón, Verón consideró que "se cumplió con un primer objetivo, pero ahora nos falta ganar el Mundial. Y la gente de nuestro país necesita que le contemos este momento".
El volante nacido en La Plata hace 26 años se refirió también a la relación del equipo con el director técnico Marcelo Bielsa, al considerar que "le devolvió al seleccionado nacional su estilo".
Sobre el sucesor de Passarella, la Brujita comentó que "es un hombre que trabaja intensamente. A nosotros nos enseñó muchísimo y le devolvió al seleccionado nacional su estilo".
Verón, quien precisamente cumplió con Passarella toda la etapa clasificatoria y participó del equipo que jugó en 1998, dijo que Bielsa "no prepara un partido dos días antes de que se juegue, sino que lo estudia desde mucho antes, le dedica meses y meses. Es admirable".
"Nos enseñó muchísimo y le devolvió al seleccionado la mentalidad y el estilo perdido. No hay que olvidarse que a este equipo el algún momento se lo criticó demasiado", opinó el volante de Manchester.
Al pedírsele una definición del equipo, Verón opinó que "este seleccionado, que es respetado por todos los países, busca generalmente jugar bien al fútbol, aunque a veces no se pueda".
Distendido y hasta amable, el mediocampista manifestó que "cuando se empieza una etapa como esta, la de la clasificación para un Mundial, se busca hacer las cosas bien. Por eso ahora tenemos la satisfacción de haber cumplido con un objetivo".
"Pero sabemos que solamente cumplimos con la primera etapa. Ahora nos falta lo más importante, que es ganar en Japón. Esto todavía no terminó y no podemos descuidar lo realizado hasta ahora", apreció.
El mediocampista que fuera absuelto por la Justicia deportiva italiana a principios de año, cuando jugaba en Lazio, a raíz del escándalo desatado por su pasaporte comunitario irregular, opinó que "este grupo tiene que seguir trabajando mucho, porque todavía no ganó nada importante".
En relación con el próximo partido de la eliminatoria, ante Brasil, del cual no podrá formar parte por haber acumulado dos amonestaciones, opinó que "hay que ganarlo. Aunque yo lo tenga que ver desde afuera", se resignó.
Verón narró también que el gol logrado ante Ecuador, en el estadio Atahualpa de Quito, "se le fue un poquito al arquero porque la altura también hizo su parte, demostrando que sus efectos siempre inciden en los partidos".
Pasaron más de tres años y dos meses para que Verón volviera a comunicarse con la prensa de su país. El 5 de septiembre no podrá jugar contra Brasil, y por su incidencia en el esquema diseñado por Bielsa será una baja muy sensible, porque el seleccionado lo necesita.
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La Ciudad
