Uruguay perdió y complicó su chance

Uruguay complicó sus chances de clasificación para el Mundial 2002 al perder inesperadamente anoche ante la ya eliminada Venezuela por 2 a 0, en el partido que abrió la disputa de la 14ª fecha de las eliminatorias sudamericanas.
El equipo venezolano, último en la tabla con apenas 7 puntos, se impuso a los conducidos por Víctor Púa (continúan en la quinta posición con 21 unidades), con los tantos alcanzados por Ruberth Morán y Alexander Rondón, a los 52' y 90'.
Para colmo de males, el equipo celeste recibió una complicación para el futuro, al ser expulsado a los 68' su defensor Gustavo Méndez.
Venezuela consiguió su tercer éxito en el historial de eliminatorias sudamericanas (anteriormente le había ganado a Ecuador por el Mundial España 82 y a Bolivia por 4-2 en esta serie), a costa de saber aprovechar la ineptitud exhibida por su adversario.
En la primera parte, el conjunto visitante mantuvo una postura demasiado cautelosa y casi ni asumió el control del partido, lo que derivó en que el desarrollo del juego fuese anodino y trabado.
Dentro de ese contexto, los limitados venezolanos dispusieron de las mejores chances, aunque fallaron a la hora de la definición.
Sin embargo, apenas iniciada la segunda mitad, los conducidos por Richard Páez comenzaron a justificar ese mejor accionar, a partir de la conquista conseguida a los 7 minutos.
En ese instante, el delantero de Unión Daniel Noriega, habilitó a Morán, quien convirtió tras superar la resistencia de Carini.
En desventaja, Uruguay buscó la igualdad por distintos caminos, pero en todos ellos le faltó precisión y puntería, amén de que tampoco tuvo suerte, pues un potente remate de Alvaro Recoba se estrelló en el travesaño, cuando el arquero Rafael Dudamel ya estaba vencido.
El panorama se volvió celeste oscuro para el visitante, cuando a los 23' fue expulsado Méndez por una fuerte infracción.
A partir de allí, Uruguay intentó en base a centros preocupar a la defensa venezolana, aunque dejó espacios para la contra, que finalmente resultaron letales.
En la última jugada del partido, Rondón corrigió casi en la misma boca del arco un defectuoso remate al arco de su compañero Jorge Rojas y Venezuela terminó festejando su segundo triunfo en esta serie eliminatoria. ¿Impensado? No, a la luz de lo exhibido, fue por demás justo.