"Cuando conocí a Chango, al principio él no entendía muy bien de qué se trataba, pero a medida que fuimos haciendo camino juntos tuvimos una gran amistad", recordó el gobernador Carlos Reutemann poco después de que las cenizas de Carlos Funes fueran esparcidas en las aguas del río Paraná. "Es un momento muy triste para todos, he tenido grandes satisfacciones con Chango", abundó, aunque se rehusó a hablar de la siempre latente posibilidad de iniciar una carrera hacia la Presidencia de la Nación, proyecto que fogoneara a viva voz el fallecido legislador. Si bien Reutemann y la comitiva de la Gobernación se reunieron frente al puente Rosario-Victoria para despedir los restos de Funes, no pudo evitar referirse a los problemas por los que atraviesa la recaudación provincial. "Los primeros días de agosto no son buenos. No quiero alarmar, pero incluso diría que son muy malos" afirmó el gobernador. En cuanto a la posibilidad de implementar bonos para enfrentar los compromisos con los empleados estatales, Reutemann precisó: "Hoy no quiero decir que lo vamos a hacer, pero si la provincia no tiene sus ingresos como corresponde... es muy difícil aventurar en Argentina más allá de los próximos diez o quince minutos".
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La Ciudad
