La prensa norteamericana dio ayer por descontado el otorgamiento de un nuevo salvataje a la Argentina, y según indicó ayer The Washington Post, el FMI accederá a la concesión de un préstamo por 6.000 millones de dólares.
El equipo encabezado por Marx mantuvo desde la mañana intensas reuniones con técnicos del Fondo, a quienes les preocupa cómo monitorear el déficit cero al que se comprometió el gobierno argentino.
Los hombres del FMI pretenden que el equilibrio fiscal se controle mes a mes, en tanto que los funcionarios argentinos propusieron una medición trimestral.
Si bien el Fondo parece bastante dispuesto a otorgar el crédito, la demora en cerrar el acuerdo genera cierta preocupación entre los enviados argentinos, dado el apuro por conseguir señales concretas y evitar que mañana los mercados castiguen a la Argentina.
La semana que pasó tuvo un saldo favorable tanto para las acciones que cotizan en la Bolsa de Comercio porteña como para los bonos que operan en el exterior.
El indicador Merval acumuló en los últimos siete días una ganancia de más del 6 por ciento, en tanto que el riesgo país bajó a 1.392 puntos básicos, lo que significó una caída de 162 puntos respecto del cierre de la semana anterior, en la que se registró el récord histórico de 1.738 puntos.
Las reuniones iniciadas ayer en Washington entre la misión argentina y el Fondo parecieran ir bien encaminadas hacia la concesión del crédito ya que, según informaron fuentes del Palacio de Hacienda, el regreso de los funcionarios argentinos no tiene fecha, aunque estiman que sería durante la semana próxima.
Hermetismo
Por su parte, los hombres del equipo económico tomaron la posición de no hacer declaraciones a la prensa hasta no concretar el nuevo acuerdo, y, en ese sentido, Marx sólo se limitó a decir que había buen clima en las conversaciones, pero que la definición iba a demorar unos días.
La delegación encabezada por el viceministro, también la integran los secretarios de Hacienda, Jorge Baldrich; de Política Económica, Federico Sturzenegger; el vicepresidente del Banco Central, Mario Blejer, y el asesor externo del Ministerio, Horacio Liendo.
Los funcionarios se entrevistaron con el número dos del Fondo, Stanley Fischer, y con el subsecretario del Tesoro norteamericano, John Taylor.
En tanto, el mismo diario norteamericano que dio por descontado la entrega de la asistencia, señaló que "Argentina no se hace ningún favor con sus proclamas exageradas de virtud, pero los políticos occidentales deben preguntarse si tendrían ese mismo valor para adoptar una austeridad fiscal en medio de una caída económica".