"Se pueden perder uno, dos o tres años para tener la universidad pública deseada, pero por el camino en el que vamos podemos terminar como en México -de paro durante 10 meses en el 99-, y eso es lo que no quiero", dijo ayer a La Capital el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Ricardo Suárez.
La máxima autoridad de la UNR se pronunció una vez más en contra de la huelga y además salió a defenderse de las declaraciones del gremio docente (Coad), que lo acusó de boicotear los paros: "El enemigo no está en Rosario", soltó.
Las declaraciones públicas que hizo Suárez mientras la universidad estaba de paro fueron tomadas por el gremio docente como un "boicot a las huelgas". La misma titular de la Coad, Anahí Fernández, manifestó a este diario que el rector "siempre sale a tirar la bronca en medio de un paro".
Suárez no quiso confrontar opiniones con el gremio, pero reiteró que "la huelga es el último recurso a tomar para enfrentarse a un ajuste". El rector dijo que se debe llegar a un acuerdo para analizar las medidas de fuerza a tomar porque "los estudiantes no quieren perder el año". Y teme que la universidad pública del país se convierta en la de México, que estuvo paralizada durante 10 meses por las huelgas.
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La Ciudad
