San Pablo. - Las pruebas entregadas por el Banco Central del Brasil contra el presidente del Senado, Jader Barbalho, son "aterradoras", expresó el fiscal general de la república, Geraldo Brindeiro. Los recursos fueron desviados desde el banco provincial Banpará hacia cuentas particulares de Barbalho y de sus familiares en una agencia de Río de Janeiro del Banco Itaú, entre 1983 y 1987, cuando el actual presidente del Senado era gobernador del estado norteño de Pará. Entre los nuevos documentos entregados por el Banco Central se incluye una planilla con el flujo de los recursos depositados en inversiones al portador hechos por el senador en el Banco Itaú. La planilla incluye varios depósitos de orígenes diversos y desconocidos y también el depósito de un cheque administrativo del Banpará, que habría sido endosado por error y depositado en esa cuenta. De allí, salieron transferencias hacia una cuenta particular de Barbalho, que hoy serían equivalentes a poco más de dos millones de dólares, como también hacia la cuenta de la ex esposa del entonces gobernador, la hoy diputada Alcione Barbalho, y hacia la del Diario do Pará, que pertenece al senador. En posesión de los nuevos datos, el fiscal constató que el volumen de recursos que circuló por esas cuentas llega al equivalente de unos 16 millones de dólares, cerca del 70 por ciento de los cuales son de origen ignorado, mientras que el resto provino del Banpará. Hace dos semanas, Barbalho pidió licencia por 60 días "para facilitar las investigaciones", alegó que era víctima de "una campaña sin pruebas" promovida por sus enemigos y se comparó a las víctimas del macarthysmo.
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