El gobierno demostró ayer graves problemas de organización para brindar información oficial sobre las conversaciones mantenidas durante toda la jornada con el subsecretario del Tesoro norteamericano, John Taylor. Las marchas y contramarchas fueron de tal magnitud que el gobierno pasó de anunciar que "no habría información oficial" sobre lo dialogado con Taylor hasta armar una breve rueda de prensa con el presidente Fernando De la Rúa. A primera hora de la tarde, se divulgó la información sobre una posible conferencia de prensa del ministro de Economía, Domingo Cavallo, luego descartada. Después se dijo que el encargado de dar la información oficial por parte del gobierno argentino sería el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, cuya conferencia fue pautada para las 18, cuando ya Taylor se había retirado de la Casa Rosada. Pero a las 18.30 funcionarios de la Subsecretaría de Comunicación anunciaron que la conferencia de Colombo quedaba suspendida y que en su lugar hablaría el vocero gubernamental, Juan Pablo Baylac. Pocos minutos después vino la contraorden: Baylac tampoco iba a hablar con la prensa y se indicó que no iba a haber información oficial sobre las reuniones de Taylor con De la Rúa y con el jefe de Gabinete. Ante la sorpresa y también el malestar de los periodistas que aguardaban, entre ellos corresponsales de medios estadounidenses, se prometió que Baylac tendría una charla informal con los periodistas. Pero esto tampoco ocurrió y recién pasadas las 19 un funcionario sorpresivamente volvió a anunciar una conferencia de prensa de Colombo para 45 minutos más tarde. Como remate de esta comedia de enredos, pasadas las 20 fue el propio De la Rúa quien inesperadamente se paró frente a los micrófonos para hacer declaraciones a la prensa.
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