La organización ecologista Greenpeace refutó ayer a la Comisión Nacional de Energía Atómica (Cnea) sobre la necesidad de finalizar las obras de la central Atucha II, porque "será un pésimo negocio". Greenpeace destacó en un comunicado que la prosecución y finalización de las obras en Atucha II "saldrá más caro que realizar otras alternativas energéticas que brindarán más desarrollo tecnológico y menos problemas ambientales. Se pretende pasar por alto que Atucha II es uno de los peores negocios que hizo el Estado argentino en materia energética", opinó Juan Carlos Villalonga, de la organización ambientalista. Asimismo, Greenpeace demandó terminar con los subsidios permanentes para que las plantas nucleares sigan funcionando y se mantenga la ficción de que la energía atómica sea una opción viable. "Hoy existen formas de producción energéticas más económicas, seguras, limpias e inagotables; sin embargo, no reciben ninguna atención por parte del Estado. Entonces, por qué tenemos que seguir pagando una tecnología obsoleta y riesgosa", completó.
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La Ciudad
