Un avión cayó en el jardín de una casa

Una avioneta bimotor cayó anteanoche en el jardín de una casa cercana al aeropuerto uruguayo de Carrasco y, milagrosamente, salvaron su vida los cuatro tripulantes y los moradores de la vivienda que dista unos 200 metros de la cabecera de una de las pistas de la terminal aérea. El aparato, un Pipper Azteca, en plena maniobra de aterrizaje, rozó la copa de un árbol y se fue a pique, rozó el techo de un garaje y se clavó en el jardín de una casa vecina en la que sus habitantes miraban TV. El piloto y el copiloto, Nelson Ibaldín y Carlos Zubelles, de 31 y 36 años, y los pasajeros Fernando Echeverry y la ciudadana argentina Marta Ruiz, sufrieron lesiones de distinta entidad de las que se recuperan en un hospital de Montevideo. El accidente dio lugar a un amplio dispositivo policial en las rutas que circundan el aeropuerto, para el socorro a las víctimas. El servicio aéreo había sido contratado en la ciudad de Tacuarembó, a 400 kilómetros al norte de Montevideo, por una empresa de desarrollo forestal. Aparentemente, la aeronave sufrió un desperfecto en el momento en que el piloto intentaba retomar la cabecera de pista.