| | Terrible consecuencia de un secreto de confesión
| Un juez federal de Nueva York ordenó ayer la excarcelación de uno de los dos detenidos acusados de un homicidio y liberados del cargo por el testimonio del sacerdote católico jesuita Joseph Towle, quien mantuvo en secreto durante doce años el crimen, cometido por otra persona. El cura durante todo ese tiempo supo que el delito de homicidio, por el que dos inocentes estaban presos, había sido cometido por otra persona, y ahora decidió contar la verdad ante la Justicia de Nueva York, ya que la Iglesia lo autorizó. Sin embargo, los fiscales, asesorados por algunos teólogos, no están de acuerdo y darán batalla en el nuevo proceso, ya que el padre Towle dio la absolución al joven que le reveló que era un homicida y, en consecuencia, se trataría de un sacramento que como tal fue violado. La ley del estado de Nueva York prohíbe utilizar en la Justicia informaciones obtenidas por sacerdotes en el secreto de confesión.
| |
|
|
|
|
|
Diario La Capital todos los derechos reservados
|
|
|