En un intento por frenar el avance de los brotes de aftosa en el país, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), establecerá sanciones a quienes no cumplan con las reglamentaciones dispuestas para el traslado de hacienda, cualquiera sea su destino. La penalización incluirá la clausura de los establecimientos que no acaten las disposiciones oficiales y multas de hasta un millón de pesos a los infractores.
La decisión adoptada por las máximas autoridades del Senasa apunta a mantener el estado de focos inactivos que se han presentado en los rodeos bovinos nacionales debido a que, si bien aumentó el número de focos, en más de 500 de ellos que ya han sido controlados se desactivó la capacidad viral de la enfermedad, por lo que no provocarán nuevos brotes de aftosa.
La decisión fue publicada en el Boletín Oficial bajo la resolución 178/2001 con la firma del presidente del organismo sanitario, Bernardo Cané, y entrará en vigencia el martes 7 de agosto próximo.
El incumplimiento de las medidas de control sanitario establecidas por el ente se considerará "falta grave" y el productor o titular del campo donde se comprueben faltas a la normativa oficial será pasibles de sanciones entre las que se destacan multas de hasta un millón de pesos para quienes infrinjan la reglamentación.
Entre otras drásticas sanciones, el Senasa dispuso la aplicación de:
* apercibimiento público o privado,
* multas de hasta un millón de pesos,
* suspensión de hasta un año o cancelación de la inscripción en los respectivos registros para operar en el circuito nacional de ganados y carnes, incluyendo la faena de vacunos,
* clausura temporaria o definitiva de los establecimientos infractores y
* decomiso de productos, subproductos o elementos relacionados con las infracciones cometidas.
En cuanto a las medidas, el ente ejecutor será el organismo sanitario nacional, y podrán aplicarse por separado o en forma conjunta, de acuerdo con la gravedad de la infracción y los antecedentes del responsable de la violación del decreto oficial.
El Senasa puntualizó que la fiscalización del cumplimiento de la normativa estará a cargo de personal del ente sanitario y, de ser necesario, de las fuerzas de seguridad.
Garantía para los mercados
Mientras trabajan en el frente interno para frenar la aparición de focos de la enfermedad, las autoridades sanitarias nacionales también se abocaron a una campaña fronteras afuera para validar la calidad de las carnes argentinas. En ese sentido, se aprestan a presentar garantías complementarias a los mercados de la Unión Europea (UE), que refuercen las acciones de control realizadas hasta la fecha, en un nuevo intento por reabrir esas plazas para las carnes enfriadas argentinas.
El eje de la presentación a Europa estará representado por el cumplimiento estricto en la primera fase de la vacunación de las haciendas locales, reforzada con la delimitación de regiones libres del virus, para impedir su expansión.
La Ciudad
