Jerusalén. -Tres personas -una de ellas, un terrorista suicida- murieron y otras ocho resultaron heridas en un atentado explosivo perpetrado cerca de la estación de trenes de Binyamina, en el norte de Israel. El grupo terrorista palestino Jihad Islámica se hizo responsable del atentado. El gabinete de seguridad deliberaba anoche sobre la casi segura represalia militar a tomar contra blancos palestinos. El atacante suicida hizo estallar la carga tras descender de un vehículo color verde, que escapó y la policía, con la ayuda de un helicóptero, inició una persecución para detener a las personas a bordo de ese automóvil, precisaron las autoridades israelíes. Luego de la persecución, dos palestinos quedaron detenidos. Fuentes del gobierno israelí advirtieron que el ejército tomaría represalias contra blancos palestinos de manera más o menos inminente. El ministro de Defensa, Benjamin Ben-Eliezer, deliberaba anoche con el gabinete de seguridad, aunque no había certeza sobre una represalia inmediata. El patrón israelí en la materia es variable. El ministro de Transportes, Eprhaim Sneh, comentó que la respuesta al terrorismo palestino debe ser un esfuerzo diario para eliminar a sus perpetradores. El día ya se había iniciado con violencia, por una serie de incursiones de tanques israelíes en Hebrón y Tulkarem, en Cisjordania. Según fuentes palestinas, una treintena de civiles resultó herido y un adolescente murió de un infarto cardíaco. Los tanques atacaron cuatro puestos de la Fuerza 17, la unidad de élite de Al Fatah. Israel adujo que esta incursión fue consecuencia de un ataque con disparos contra tropas hebreas que dejó dos soldados heridos. El de Binyamina es el atentado más grave en Israel desde el ataque suicida en la puerta de una discoteca de Tel Aviv el pasado 1º de junio, que provocó la muerte de 22 personas. Dore Gold, consejero del primer ministro israelí Ariel Sharon, indicó que Israel consideraba a Arafat responsable del atentado suicida y acusó a sus fuerzas de participar en una "coalición terrorista". El gabinete israelí de seguridad se reunió de inmediato, lo que indicaba que se estaba diseñando la represalia. El atentado de Binyamina ocurrió poco antes de la ceremonia de inauguración en Jerusalén de los Juegos Macabeos.
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