Belgrado. - El ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic aseguró a su familia en una conversación telefónica que abandonará la cárcel de Naciones Unidas en la ciudad holandesa de Scheveningen "sano y salvo", informó la radio belgradense B-92. Así se lo confirmó Branimir Gugl, uno de los abogados de Milosevic, a la emisora. Milosevic ordenó a su equipo de abogados serbios que diseñen una defensa "política", porque se considera un detenido político. Según Gugl, Milosevic tranquilizó a su familia en Belgrado por teléfono. "Aguantaré, no se preocupen", le dijo a su esposa, Mira Markovic. El ex mandatario yugoslavo no reconoce ni la competencia del Tribunal Penal Internacional de la ONU para los crímenes de guerra en la antigua Yugoslavia (TPIY) ni la acusación que pesa contra él. Será defendido por los mismos ocho abogados belgradenses que ya le representaron en la capital yugoslava. Gugl explicó que Milosevic les "ordenó" preparar una defensa "política", ya que en su caso se trata de un "proceso político". Se supo además que Milosevic pidió dinero, ropa y libros para su celda en La Haya, según comentó uno de sus abogados. Branimir Gugl dijo que el ex presidente yugoslavo, que fue transferido el jueves de Serbia a la prisión del tribunal de crímenes de guerra de Naciones Unidas, lo llamó ayer a su casa. "Milosevic me pidió dinero, ropa y algunos libros. La primera persona que vaya a verlo le llevará esto", dijo Gugl. Milosevic, figura central de una década de guerras en los Balcanes que fuera acusado por cometer crímenes contra la humanidad, solicitó ver a uno de sus abogados mañana, lunes. Zdenko Tomanovic, otro abogado en Belgrado, dijo que viajaría mañana a La Haya para conversar con Milosevic antes de su primera comparecencia ante el tribunal prevista para el martes. Se prevé que Milosevic mantenga al mismo equipo de ocho abogados, incluidos Tomanovic y Gugl, quienes lo han defendido contra cargos de corrupción en su país. Una fuente diplomática en Belgrado dijo que no estaba claro si Tomanovic sería el único abogado defensor de Milosevic durante todo el juicio. Se espera que la comparecencia ante el tribunal el martes sea sólo una breve audiencia preliminar. Una fuente estrechamente vinculada con el equipo legal aclaró que Milosevic continuaba manteniendo su inocencia y alegaba que las acusaciones en su contra eran infundadas y que el tribunal es una institución política instaurada por sus enemigos occidentales para castigarlo a él y a su país. "Milosevic considera que todos los cargos en su contra son políticos y no se siente culpable por ninguno de ellos", comentó la fuente. En tanto, la fiscal general del TPI de La Haya, Carla del Ponte prepara sus armas. El testigo Rame Shabani, un albanés de Kosovo que fue testigo de una masacre de 45 de sus coterráneos en 1999, es uno de los muchos que se presentarán en La Haya para aportar pruebas contra Milosevic y sus esbirros. Ayer, Shabani se encontraba en su casa en el pueblo kosovar de Racak, y narró a periodistas cómo sobrevivió el 15 de enero de 199 a la matanza de 45 civiles a manos de los militares serbios.
| |