Año CXXXIV
 Nº 49.157
Rosario,
domingo  24 de
junio de 2001
Min 6º
Máx 12º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





El escritor pidió que se desistiera de organizar homenajes
Sábato cumple 90 años en recoleto alejamiento del mundillo literario
Sus asistentes dijeron que goza de buena salud aunque se recluye en su casona de Santos Lugares por el frío

El escritor Ernesto Sábato cumple hoy 90 años acompañado por sus familiares y algunos pocos amigos, en su casona de la calle Severino Langeri de Santos Lugares. "Sólo está previsto que lo visiten sus familiares y algunos amigos, pero muy pocos", explicaron sus asistentes, ante la consulta sobre si se preparaba algún festejo en especial.
Su agente literario, Guillermo Schavelzon, explicó ayer que "Sábato se negó a que organizáramos cualquier homenaje o festejo", pero no descartó que "se acerquen algunos escritores amigos para acompañarlo" durante la jornada.
Sábato se encuentra "muy bien de salud" indicaron sus asistentes, pero debido al intenso frío esta semana permaneció encerrado en su casona de Santos Lugares.
Las condiciones climáticas impidieron que realizara sus habituales caminatas hasta la vecina estación de trenes de Santos Lugares, distante a 300 metros, que suele recorrer al igual que la plaza comunal adyacente.
Además de saludos, Sábato recibió el llamado de escritores amigos para que sume su firma a la convocatoria a la concentración del miércoles venidero que se realizará frente al Congreso Nacional desde las 17, en apoyo de la Ley de Libro.

El camino de las ciencias
Sábato nació el 24 de junio de 1911 en Rojas, localidad vecina a Junín, en la provincia de Buenos Aires. Fue el décimo de los once hijos varones de Francisco Sábato y Juana María Ferrari. En 1924 ingresó a la Universidad de La Plata, en la Facultad de Ciencias Físico matemáticas. En esa época militó en el Partido Comunista, al que adhirió hasta mediados de la década del 30.
En 1938, cuando ya estaba casado con Matilde, recibió una beca del Laboratorio Joliot Curie de París, para especializarse en radicaciones atómicas. Un año después prosiguió su especialización en el Instituto MIT de Massachusetts.
En 1940, de regreso al país, comenzó a alejarse de las ciencias para ingresar al ámbito literario de la mano de Victoria Ocampo, quien lo introdujo en el grupo de la revista Sur. Meses después aparecieron sus primeras colaboraciones literarias en el suplemento de La Nación.
En 1943, en medio de una crisis existencial, se refugió en un rancho de las sierras cordobesas donde escribió "Uno y el universo". Las ciencias, definitivamente, se alejaban de sus antecedentes. Su siguiente novela, "El túnel", sería desechada por varias editoriales, hasta que Sur la editó por su cuenta en 1948. La repercusión de "El túnel" sería inmediata y meses después fue traducida al francés por el sello Gallimard (con la recomendación de Albert Camus) y se publicó en Nueva York.
Antiperonista convencido, en 1956 publicaría un furibundo (y olvidable) ensayo sobre el régimen depuesto: "El otro rostro del peronismo".
En 1961 publicó "Sobre héroes y tumbas", su obra más famosa, que ya ha sido traducida a 33 idiomas. La continuación de esta novela, "Abaddón el exterminador" fue publicada en 1974 y recibió el Premio Consagración Nacional.

Condecoraciones y medallas
En 1979 fue condecorado con el título de la Legión de Honor de Francia y Gran Cruz al Mérito Civil en España. Ese año apareció su ensayo "Apologías y rechazos".
En 1984 fue distinguido como Ciudadano Ilustre de la ciudad de Buenos Aires y el rey Juan Carlos le entregó el Premio Miguel de Cervantes.
Con el retorno de la democracia, fue designado por el ex presidente Raúl Alfonsín como presidente de la Conadep, organismo que investigó la desaparición de personas durante la dictadura.
Después de un extenso intermedio, su último libro "La Resistencia" apareció hace dos años simultáneamente en la Argentina y España, donde vuelca sus reflexiones sobre la sociedad contemporánea y como testamento literario. "La Resistencia" es un alegato contra la deshumanización y al mismo tiempo un mensaje de esperanza para los jóvenes.
La última aparición pública de Sábato fue durante la pasada Feria del Libro porteña, donde durante casi tres horas firmó ejemplares en el stand de Seix Barral, con un excelente humor y sin que los años le pesaran.



Sábato no quiere ni fiestas ni agasajos para su aniversario.
Ampliar Foto
Notas relacionadas
"No quiero que me jodan"
Diario La Capital todos los derechos reservados