Opinión: Bauza, dentro del contexto

Gustavo Conti

En cada uno de los medios locales en los que habló en la semana que se fue, Edgardo Bauza debió responder sobre el artículo de Ovacion del sábado 16, en el que refirió que pese a que la hinchada de Central acompañó al equipo en la semifinal de la Copa y lo respaldó en toda la previa al partido, "durante" el mismo no se hizo oír lo suficiente para meterle presión al rival.
Como algunos rojinegros se tomaron de ello para comparar a Bauza con el Indio Solari, aquel que siendo técnico de Ñuls trató directamente a esa hinchada de "pecho frío", el Patón quiso zafar afirmando luego que sus dichos estuvieron fuera de contexto.
Más allá de que Bauza reconoció así que habló de la cuestión, expresó sólo una parte de la historia. Es cierto que el tema se trató primero informalmente, pero cuando Ovacion le hizo enseguida la pregunta "oficial", es decir, para que respondiera lo que sería publicado en el diario, no contestó de compromiso y admitió el fenómeno, algo que además está grabado.
Bauza no ofendió al hincha de Central, porque también lo elogió hasta el hartazgo. El hecho que los de Newell's lo intenten hacer bandera para equilibrar aquello de "pecho frío" es sólo folclore o consuelo tonto. En todo caso, el Patón abrió un debate que el hincha auriazul puede hacer provechoso.
Por ejemplo, muchos de los que idolatraban al Patón con la camiseta 6 en la espalda, en el banco le dieron la ídem. Esa puede ser una causa de la falta de aliento a la hora del partido, donde el sentimiento de Central-club-camiseta de las horas previas, se mezclaba con "el equipo de Bauza" que lo representaba. Y ese desacuerdo de algunos con el DT pudo generar la apatía en ese momento y no antes.
También habría que preguntarse si la agresividad de los últimos años entre los antagónicos grupos de barrabravas (ubicados en una y otra bandeja de la popular), no hizo que la exteriorización de la pasión quede relegada, principalmente en los mismos hinchas de corazón que la sufren siempre de cerca. Y se sabe que es en la popu donde se multiplican las voces.
Puede ser además que el hincha necesite un gran motivador (jugador, DT o dirigente). Pueden ser esas u otras cuestiones. Ese debate debió generar los dichos de Bauza, cuyo pecado para con los hinchas fue sólo quedar a las puertas de festejos grandes. No hacía falta retractarse o insinuar que el periodista de Ovacion no fue honesto con él, más allá de que, nobleza obliga, nunca lo mencionó.