La provincia de Entre Ríos ofrece muchas opciones tanto para quienes desean relajarse y disfrutar del contacto con la naturaleza, para quienes prefieren diversión y salidas nocturnas, como para los que necesitan mejorar su salud.
En estos casos, nada mejor que visitar los baños termales de las ciudades cercanas al río Uruguay, como Colón, Villa Elisa, Concordia y Federación. Cada una tiene su encanto y sus particularidades.
A lo largo de la ribera del Uruguay las propuestas son muy variadas a la hora de reponer fuerzas y olvidar el caos urbano.
En un marco natural, estas ciudades tienen variedad de restaurantes, bares y puestos de comidas, así como una gama muy amplia de hoteles, hosterías y parajes, además de actividades recreativas como la pesca y los casinos.
Y para quienes gustan ir de camping, Entre Ríos es un lugar muy apropiado, porque cuenta con comodidades y servicios y cumple a rajatabla con las exigencias sanitarias.
Clima de verano
Además de ser una buena opción para relajarse y divertirse en familia, el contacto con las aguas termales beneficia a las personas que sufren de estrés, reumatismo, afecciones crónicas del aparato respiratorio y de la piel, o que tienen secuelas de intervenciones quirúrgicas.
Las templadas aguas minerales, de entre 30 y 45 grados de temperatura, generan un clima veraniego, con los visitantes paseándose en malla y disfrutando del agua aún en pleno invierno.
Los complejos ubicados en esta zona tienen piletas al aire libre o cubiertas, algunas con hidromasajes y otras especiales para los niños. Además hay otros servicios como salas de masajes y canchas deportivas.
Por la ruta nacional 14, de sur a norte, la primera ciudad termal es Colón. El balneario municipal, inaugurado en 1996 en la costanera norte, tiene diez piletas con aguas de entre 33 y 40 grados que surgen de un pozo de 1.500 metros de profundidad -uno de los más profundos de Latinoamérica-.
Colón o la Ciudad Paraíso, que fue fundada por el general Justo José de Urquiza en 1863, ofrece a sus visitantes un casino, playas y actividades deportivas.
Treinta kilómetros al norte, y rodeada de pequeñas cumbres, se encuentra Villa Elisa, ciudad que posee otro importante complejo termal.
Allí las aguas fluyen a 41 grados centígrados y tienen la particularidad de ser saladas, por lo que se les adjudican numerosas propiedades terapéuticas.
El complejo, con capacidad para 600 personas, tiene seis piletas, un lago artificial y un área de bungalows y camping.
Retomando la ruta 14 hacia el norte se llega a San Antonio de Padua de la Concordia, la localidad más importante sobre el río Uruguay.
A sólo 10 Kilómetros del centro, en el Balneario Vertiente de la Concordia -un predio de 25 hectáreas de eucaliptos y pinares-, se puede disfrutar de las aguas más calientes de la región, que surgen en cinco piletones y alcanzan temperaturas que van desde 36 a 45 grados.
Para completar la visita reparadora, este complejo ofrece sala de masaje, parrillas, canchas de fútbol y un circuito de mountain bike. Además del clásico paseo de los artesanos, todos los fines de semana en la plaza 25 de Mayo. Muy cerca de allí está el Club de Golf con su cancha de 18 hoyos.
En el noreste de la provincia, en la ciudad de Federación, también fluyen aguas con propiedades minerales en un complejo rodeado de jardines que tiene seis piletas de distintas temperaturas. Allí se puede visitar el spa La Posta de Mandisoví y el gigantesco lago de Salto Grande, para navegar y pescar.
La Ciudad
