Presenta una sola función de "Alicia en el país de las maravillas"

El Teatro Negro de Praga actúa hoy en el Astengo

El elenco del Teatro Negro de Praga regresa a Rosario para presentar una sola función de "Alicia en el país de las maravillas", hoy a las 20, en el Auditorio Fundación Héctor I. Astengo, Mitre 754. El elenco checoslovaco, que cumple 40 años en escena, es dueño de una técnica teatral única que lo distingue en todo el mundo.
Los artistas depuraron un estilo que nació en 1961 cuando Jiri Srnec, un músico y actor checo que actualmente es el director artístico de la troupe, se las ingenió para desafiar la ley de la gravedad sobre un escenario. Con una técnica que ya se había utilizado en cine y en fotografía Srnec experimentó un sistema de trabajo desarrollado sobre un fondo de terciopelo negro que jugaba en combinación con luces negras, creando la ilusión de que los actores y los objetos podían volar por el aire.
El Teatro Negro de Praga debutó en el Festival de Teatro de Edimburgo hace cuatro décadas y hoy llega a Rosario para ofrecer su versión teatral de "Alicia en el país de las maravillas", obra que fue estrenada en 1991 con la particular mirada surrealista que el elenco derrama en cada puesta en escena que lleva adelante.
La compañía está integrada por cuarenta artistas que se dividen en dos grupos. Uno de ellos ofrece funciones permanentes en Praga y el otro realiza giras visitando las principales ciudades del mundo.
Entre los 17 actores que hoy visitan Rosario se reparten la tarea artística que distingue al Teatro Negro. Algunos de ellos interpretan papeles en escena y otros se encargan de mover objetos desde la cámara oscura creando la ilusión de que los mismos cuentan con vida propia.
Uno de los codirectores del elenco, Pavel Hortek, admitió que la temática de la obra que se presentará esta noche, basada en el popular cuento de Lewis Caroll, es tan surrealista como la técnica que utiliza el elenco. Hortek comentó también que la música que acompaña la pieza fue creada especialmente para esta representación teatral y que, rompiendo una tradición de la compañía que siempre estrena obras propias, en este caso recurrieron a una propuesta de adaptación de la reconocida obra de la literatura inglesa.
Aunque el mecanismo al que apela el Teatro Negro de Praga resulte conocido, cada presentación del elenco checo es una nueva oportunidad para dar rienda suelta a la imaginación y creer, por un momento, que puede suceder algo que las leyes de la física indican como imposible.

El encanto de los cuentos de hadas en un clima especial.