Fernando Toloza
El actor de Arturo Maly murió ayer en forma sorpresiva de un paro cardíaco en la ciudad cordobesa de Morteros (en el límite con Santa Fe), adonde había llegado con la gira de la obra teatral "Sinvergüenzas", una adaptación al público argentino del argumento de la película inglesa "Todo o nada".Maly, que iba a actuar ayer a la noche, hoy y mañana en la Sociedad Italiana de Morteros con "Sinvergüenzas", fue internado en la clínica San Roque de esa ciudad, pero murió de un paro cardíaco.
El actor, de 63 años, había llegado ayer a la mañana a Morteros, desde otra ciudad de Córdoba -provincia donde se encontraba de gira desde hace una semana junto al elenco de "Sinvergüenzas"- y cuando se encontraba solo en la habitación de un hotel, empezó a sentir molestias y dolores cardíacos.
Según informaron fuentes de la radio Cadena Tres de Córdoba, uno de sus compañeros de tablas, Diego Díaz, señaló que "Maly se encontraba solo en la habitación cuando se produjo el paro cardíaco, alcanzó a abrir la puerta para avisar lo que le estaba sucediendo y, de pronto, se desmoronó en el pasillo".
Inmediatamente, Díaz, Toti Celiberto, Cutuli y Esteban Prol, entre otros de sus compañeros de "Sinvergüenzas", llamaron a un servicio de emergencias, que llegó a los pocos minutos al hotel, donde intentaron reanimarlo sin éxito, por lo que decidieron llevarlo de urgencia al sanatorio privado San Roque.
Maly ingresó a esa clínica a las 12.45 de ayer y fue atendido por el médico Sergio Gandolfo, quien explicó que "se le hicieron todos los servicios de reanimación posibles", pero finalmente, a las 13.30, después de intentar salvarlo por todos los medios, constató que ya había muerto.
El jueves pasado se estrenó en los cines de todo el país la película "La fuga", que ha pasado ha convertirse en su último trabajo actoral. Casualmente, en el filme de Eduardo Mignogna Maly también moría.
En "La fuga" interpretaba a Pedro Escofet, el dueño de una casa de apuestas que tenía por clientes a lo más selecto de la sociedad porteña de las primeras décadas del siglo XX. Entre sus "colaboradores" se contaba Ricardo Darín, un tahúr al que había hecho encerrar en prisión por engañarlo en un asunto de negocios.
Maly fue actor de teatro, cine y televisión. En los últimos tiempos se ocupó de hacer los personajes de villanos más creíbles de la televisión, especialmente en las telenovelas, de "Celeste", con Andrea del Boca, hasta "Muñeca brava", con Natalia Oreiro, pasando por "Nano", con Gustavo Bermúdez y Araceli González. Esa característica hizo que su voz sea usada para el personaje del malo en la película de dibujos animados "Los Pintín", que se estrenó en las vacaciones de invierno del año pasado. "Cóndor Crux", la primera película argentina hecha completamente por animación computada, usó igualmente la voz de Maly para uno de sus personajes.
Los papeles de villano de Maly lo divertían y se había hecho famoso en el medio por su buen humor y por su compañerismo. El cine fue un vehículo privilegiado para esos caracteres. En la pantalla grande Maly trabajó mucho en películas del género policial como "Ultimos días de la víctima" y "Noches sin lunas ni soles". También actuó en la adaptación de la novela de Osvaldo Soriano "No habrá más penas ni olvido".
Entre los proyectos que quedaron truncos por su muerte se cuenta el regreso a Canal 7, en el que el actor había hecho en 1985 el ciclo "Cuentos para ver", donde se prepararon adaptaciones de cuentos de Rodolfo Walsh, Fray Mocho y Roberto Arlt, entre otros grandes escritores de la literatura argentina. Sobre este regreso Maly tenía grandes expectativas, ya que sentía que el canal iba a buscar su rumbo en la calidad, igual que lo hacen los grandes canales estatales del mundo, como la BBC y la TVE.
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La Ciudad
