Lima. - Por primera vez en más de 10 años, los peruanos fueron testigos anoche de un debate entre los candidatos presidenciales Alejandro Toledo, de Perú Posible, y Alan García, del Partido Aprista Peruano, quienes lanzaron sus plataformas electorales con la intención de sacarse ventaja y también de vencer la tendencia al voto en blanco que las encuestas ubican en un 31 por ciento.
El debate, que CNN en español transmitió en vivo, generó grandes expectativas. El encuentro, que duró noventa minutos y se realizó en un hotel de la capital peruana, fue moderado por el periodista Guido Lombardi Elías. Los temas que abarcaron ambos candidatos fueron democracia y gobernabilidad, política económica y empleo, política social y alivio de la pobreza, derechos humanos, política anticorrupción y antidrogas, y descentralización, gobiernos regionales y locales.
El último debate de candidatos presidenciales presenciado por los peruanos fue en 1990, entre el entonces desconocido Alberto Fujimori y el novelista Mario Vargas Llosa. Horas antes de que ambos candidatos se trabaran en combate, un sondeo de opinión indicó el viernes que el centrista Toledo parece encaminarse a una fácil victoria en las elecciones.
A pesar de esa ventaja del economista de 55 años, algunos analistas estimaron que García, de 51, podría haberse beneficiado más del debate por su excelente oratoria y dominio de escena, aparte de que tiene más que ganar por su ubicación en las encuestas. "En cuanto a la cuestión psicológica está el factor de la teatralidad. Ambos emplean este recurso, pero García con más acierto. Los gestos y giros de Toledo se ven artificiales", dijo el analista político Luis Pacheco.
Pero los partidarios de Toledo afirmaron que los votantes destacaron del debate los temas de fondo, no la forma. "Los peruanos son inteligentes y no se inclinarán por el que habla bonito, sino por el que plantea soluciones a los problemas", dijo Luis Solari del partido Perú Posible que postula a Toledo, de 55 años.
¿Decisivo?
"Este debate fue esperado por la población, forma parte del proceso, pero no creo que resulte decisivo como algunos esperan", dijo el analista político Alvaro Rojas. El debate fue esperado también por los inversionistas y el mercado local de capitales, que se ha mostrado volátil en las últimas jornadas, según agentes financieros.
Para llegar al debate, organizado por el organismo privado de observación electoral Transparencia, los representantes de ambos candidatos plantearon sus condiciones. En el debate que tuvo como sede un hotel de Lima que el viernes amaneció bajo intensa custodia policial, Toledo y García tuvieron tres minutos para exponer sus posiciones y un minuto para replicar sobre cada uno de los cuatro temas escogidos: política económica, política social, derechos humanos y descentralización.
Toledo y García llegaron a la segunda ronda tras situarse como los dos candidatos con mayor total de votos en las elecciones de abril. Las elecciones fueron convocadas después de que Fujimori, tras una década en el poder, fue destituido por el Congreso en noviembre bajo cargos de "incapacidad moral", luego del colapso de su gobierno por el mayor escándalo de corrupción en el país andino de 25,6 millones de habitantes.
El gobierno de Alan García, de 1985 a 1990, que dejó a Perú agobiado por la hiperinflación, no logró detener tampoco el auge de dos grupos guerrilleros marxistas.