El rector se opone al proyecto de la comisión de notables

Ricardo Suárez: "Un nuevo impuesto no soluciona la situación de la Universidad"

El funcionario está en contra de arancelar la educación con una alícuota al impuesto a las ganancias

Eugenia Langone

"No me parece que la propuesta sea viable, filosóficamente estoy en contra". Contundente, el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Ricardo Suárez, no dejó ninguna duda al referirse a la iniciativa de arancelar la educación a través de una alícuota al impuesto a las ganancias que se cobraría a los padres de los estudiantes que tengan sueldos superiores a los 2 mil pesos. La comisión de notables que tendrá a su cargo el diseño de la nueva reforma universitaria, encabezada por el ex ministro Hugo Juri y el actual titular de la cartera de Educación, Andrés Delich, fue la que lanzó la propuesta. El rector de la UNR opinó que "no se puede golpear con un nuevo impuesto a la clase media" porque "no se soluciona la situación de la Universidad", y aseguró además que el consenso de una reforma "debe ser de abajo hacia arriba".
El proyecto, que el ministro Delich ya había mencionado como "una idea personal" semanas atrás, pretende cobrar un arancel a los padres de los estudiantes de la Universidad que ganen más de dos mil pesos, y se implementaría a través de una sobretasa de entre el 1 y el 2 por ciento en el impuesto a las ganancias o en el impuesto a la riqueza. Ahora la comisión trabajará hasta octubre, mes en el que tiene que cerrar la propuesta.
De esta manera, para los padres que tengan un sueldo de 2 mil pesos el arancel variaría entre los 20 y los 40 pesos, mientras que para un padre que gane 10 mil pesos por mes la sobretasa estaría entre los 100 y los 200 pesos.
Los estudiantes deberían presentar el número de DNI de sus padres y la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), a través de la Dirección General Impositiva (DGI), quedaría automáticamente a cargo de la recaudación. Los notables estimaron que se "podría llegar a recaudar el 25 por ciento del presupuesto universitario", que se utilizaría para financiar becas a los estudiantes de menores recursos.
La iniciativa es conocida como "proyecto Petrei", fue elaborada en la década del 80 y ahora sería rediseñada. El ideólogo de la propuesta es el economista cordobés Humberto Petrei, ex funcionario del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), asesor del gobernador José Manuel de la Sota e integrante de la comisión de notables.
Ante esta propuesta que el Ministerio de Educación de la Nación quiere desarrollar, el rector de la UNR no dejó dudas sobre su posición, y así lo hizo ver a La Capital.
-¿Cuál es su opinión respecto de este proyecto de arancelar la Universidad a través del impuesto a las ganancias o el impuesto a la riqueza?
-Esta es una vieja propuesta de los años 80 y no se la puede presentar de la misma manera. No me parece un proyecto viable y creo que no es el momento de andar aplicando más impuestos a la clase media, que ya está golpeada. Filosóficamente, estoy en contra del proyecto porque la situación universitaria no se soluciona con impuestos, sobre todo cuando no se hacen campañas reales contra la evasión. Esto va a traer más inconvenientes que soluciones.
-¿Esto podría venir a acentuar las diferencias que ya existen dentro de la Universidad, teniendo en cuenta que es la clase más acomodada la que tiene acceso a la educación superior y no la gente de menores recursos?
-No sé si va a ser así, pero es cierto que la gente pobre no puede tener educación superior y eso indica que estamos fallando en algo: no hay igualdad de oportunidades. Tengo muchas dudas, pero estoy convencido de que otro impuesto es improcedente.
-¿Qué alternativas viables ve usted para el sostenimiento de la Universidad?
-La Universidad debe salir a hacer tareas de extensión, que en realidad son bastantes limitadas. Luego queda alentar el merchandising de las universidades norteamericanas. El tema pasa por cómo se concibe a la educación, si es gasto o una inversión. Si es una inversión, la tiene que hacer el Estado. Pero si es un gasto, se ajustará a las leyes del mercado. Me preocupa la mansa aceptación de las leyes del mercado y que no haya propuestas firmes para mantener las banderas ideológicas de la Universidad pública.
-Algunos dicen que es un "arancel encubierto", ¿para usted es así?
-No sé si acá hay buenas intenciones, si el camino del infierno está empedrado de buenas intenciones o si en realidad esta idea tiene como fin terminar en el arancelamiento de la Universidad. No creo que sea un arancelamiento encubierto, creo que es un impuesto más.
-¿Preferiría usted que participara toda la comunidad educativa de este debate y no sólo un grupo de notables?
-Es un grupo que en principio parece representar a la gente vinculada a la educación, pero creo que tiene que haber un consenso de base porque el debate tiene que venir de abajo hacia arriba. Forman un grupo de notables que pueden tener notables ideas, pero esas idea hay que bajarlas a la realidad.
-La Universidad Nacional de Córdoba funciona con un aporte voluntario, ¿cómo ve esa alternativa?
-En Córdoba funciona muy bien, pero no voy a ser yo el que lo proponga para Rosario porque la base es que el Estado debe sostener a la Universidad pública. No se puede aceptar mansamente este estado de las cosas.

Suárez no tuvo reparos para pegarle al gobierno.