| | Mercados Buenas propuestas, faltan hechos El canje de los títulos públicos y el acuerdo con el FMI inyectaron optimismo al mercado, pero no fue suficiente
| Salvador Di Stefano
Las propuestas de megacanje de títulos públicos, más la posible firma del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, inyectaron optimismo a una alicaída plaza financiera, que en los últimos días comenzó a observar una mejora relativa. El riesgo país ya no se ubica en los 1.300 puntos, pero no puede bajar de los mil puntos, lo que deja como resultado una alta tasa de interés y muy lejos la posibilidad de una inmediata reactivación económica. La recaudación tributaria de abril dejó a más de un hombre de gobierno desilusionado. Si no se cuenta el impuesto al cheque, los ingresos se habrían ubicado en torno de los 3.350 millones, cuando un año atrás se recaudaron 3.980 millones de pesos. Con semejante caída en la recaudación, difícilmente pueda cumplirse la meta de déficit con los organismos financieros internacionales, que implica llegar a un déficit de 6.500 millones, que de por sí ya es elevado. Si el gobierno hubiera cerrado el ejercicio fiscal en el mes de marzo, el déficit anualizado hubiera sido de 7.800 millones de pesos, por ende se tiene un desvío de 1.300 millones de pesos en las metas anuales. Como en lo que resta del año se espera una caída de la recaudación de 2.700 millones, tenemos por delante un ajuste presupuestario (ya sea vía ingresos o egresos) de 4.000 millones de pesos. A prima facie, no parece probable que este ajuste pueda llevarse adelante sin mediar una fuerte rebaja de gastos, hecho que por el momento no resulta probable dada la falta de decisión política por parte de los gobernantes de turno. En tanto, no habría lugar para una nueva suba de impuestos que termine mejorando efectivamente la recaudación tributaria. Las últimas reformas impositivas fueron un verdadero fracaso, ya que recaudaron mucho menos de lo esperado e inyectaron una alta dosis de pesimismo, y derivaron en reiteradas profundizaciones del escenario recesivo. En cuanto al megacanje, ascendería en la primer etapa a los 15.000 millones de dólares, y se tomarían los bonos con vencimiento entre los años 2001 y 2004, otorgándose títulos con vencimiento en los años 2007, 2011, 2021 y 2031. El canje se realizaría teniendo en cuenta el valor nominal de los títulos, ofreciéndose a cambio una tasa mixta, que será más elevada que la que tienen actualmente. El canje de deuda hace que la deuda total tenga una maduración más larga que la actual. No obstante, el país no se librará de pagar los intereses anualmente, por ende persistirá el problema del déficit del Estado en el corto plazo. El ministro de Economía sigue sin dar precisiones acerca del verdadero objetivo que busca su plan económico. Los números no serán fáciles de cerrar, no obstante busca permanentemente el consenso necesario para poder reestablecer la confianza en los mercados. Durante la semana que terminó, la tasa de call comenzó a mostrar una leve baja, y se espera que en la segunda quincena del mes, las tasas pasivas reflejen un importante descenso. En cuanto a los bonos, sería aconsejable tomar posición en aquellos que no se someten al canje, como podrían ser los Bontes 2005, cuya tasa escrita está mostrando un rendimiento del 12,125% anual, en tanto que el retorno de la inversión se ubica en el 16% anual. Con estos rendimientos es imposible pensar en un aumento de la inversión productiva. Por prestarle dinero al Estado un agente económico gana el 16% sin hacer nada y libre de impuesto; por ende, si hay que producir, trabajar y pagar impuestos, los agentes económicos demandarán como mínimo una tasa superior al 16% anual, tasa que no es muy normal en la economía real, por no decir casi imposible de conseguir. En cuanto a las acciones, la suba podría venir acompañada por la caída en el riesgo país, ya que por la dinámica propia de las compañías no hay posibilidades de fuertes subas en las ganancias empresariales. No obstante, los bancos seguirán siendo los preferidos, dada la alta tenencia de bonos que poseen. Para dar un ejemplo neutral, el conjunto del sistema financiero tienen títulos públicos por un valor de 18 mil millones, cifra similar a su patrimonio. Otros papeles a tener en cuenta son los del sector siderúrgico como Acindar, Siderca y Siderar, aunque desde nuestro punto de vista, seguimos apostando más a Acindar que a las empresas del grupo Techint. Conclusión: u Esta semana se anunciarán los detalles del megacanje de bonos, y esto llevará tranquilidad a los mercados, produciéndose una suba en los títulos públicos argentinos, esperando una baja del riesgo país por debajo de los 1.000 puntos. u El acuerdo con el FMI se firmará entre los días 21 y 25 de mayo, y esto será muy positivo para el mercado, ya que será una importante inyección de confianza. u Las acciones irían en busca de una nueva suba, que posicionaría a este indicador por encima de los 450 puntos. u Por el momento hay buenas propuestas, falta que se materialicen en hechos concretos para que el mercado muestre una fuerte recuperación.
| |
|
|
|
|
|
Diario La Capital todos los derechos reservados
|
|
|