La aparente nacionalidad japonesa del ex presidente Alberto Fujimori se convertiría en un problema jurídico de suma gravedad para Perú porque sus actos serían cuestionados y su rúbrica debería ser retirada de la Constitución de 1993, opinó un alto funcionario electoral en declaraciones publicadas ayer. "Los actos de gobierno hechos por un extranjero son cuestionables, pero también están los hechos consumados porque, de no ser así, los 10 años de la historia del Perú (entre 1990 al 2000) quedarían en blanco y eso no puede ser", afirmó el presidente del Jurado Nacional de Elecciones, Manuel Sánchez Palacios. En ese sentido, el titular del máximo órgano electoral dijo que el Congreso podría retirar la firma de Fujimori de la actual Constitución y revisar su promulgación, hecha un año después de su "autogolpe". En aquella Carta Magna, Fujimori introdujo la figura de la reelección consecutiva, que posteriormente manipuló y consiguió, con el rechazo de importantes sectores políticos, tres períodos presidenciales.
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