El peaje que se abonará al pasar por el puente a Victoria será más caro de lo previsto. Costará 9,80 pesos aproximadamente para los autos medianos ya que la tarifa fijada al momento de la concesión se ajustará en un 10 por ciento cuando se habilite la obra. Desde la empresa, se explicó que el valor establecido para septiembre del 97 era de 7,40 pesos más IVA, pero a ese precio se le debe aplicar el índice de precios mayoristas de los Estados Unidos, según estipula el contrato, que puede oscilar ese porcentaje.
Los números también variaron en relación a la cantidad de vehículos que circularán por día sobre la conexión física. No sólo por la cantidad que pasarán desde la primera jornada, sino también por la distinta percepción que se tiene en cuanto al crecimiento del tráfico. El gerente general de Puentes del Litoral SA, Carlo Del Mastro, dio a conocer un nuevo estudio en ese sentido. "De los 3.100 rodados que circularían el primer día según el estudio del 97, un estudio similar hecho este año señaló que hubo un descenso del 10 por ciento y la curva de crecimiento sostenida prevista al principio ya no es la misma", apuntó.
La falta de reconversión y ampliación de la red vial entrerriana es otro motivo de preocupación para la firma. Se requiere de una bajada (tipo by pass) del puente al acceso de Victoria y el mejoramiento de las rutas que llegan a esa ciudad.
Señales de preocupación
Del Mastro dijo que si bien el costo del peaje es una tarifa no variable (7,90 más IVA) que fijó el Estado cuando se licitó la obra, ésta se puede ajustar de acuerdo al índice de precios mayoristas de los Estados Unidos. Gabriel Hernández, gerente financiero de la firma, explicó que la variación para cuando se inaugure la obra, con respecto a septiembre del 97, puede ser entre el 8 y 10 por ciento. Por lo que se animó a decir que el costo del peaje para un coche mediano será de 9,80 pesos, con IVA incluido.
En diálogo con La Capital, el gerente general de Puentes del Litoral analizó los datos sobre la caída en la cantidad de vehículos que pueden pasar por el puente. "La recaudación será muy distinta a la que se preveía en el 97", dijo, y, entre los motivos, señaló "la recesión económica, la caída de los ingresos y las dificultades que presenta el Mercosur".
En relación a las obras complementarias de la conexión física, el empresario italiano indicó que "la realidad es una sola: mientras el puente avanza, del otro lado (en Entre Ríos) hay muchos planes pero no se ven máquinas trabajando".
La ampliación de la ruta a Nogoyá y la bajada del puente a Victoria están incluidas en el Plan Federal de Infraestructura. "Pero no dan los tiempos, el Rosario-Victoria estará listo quizás antes de que se concreten esas obras", manifestó. "Se habla mucho pero las mejoras se siguen esperando", concluyó.
Consultado sobre los pedidos de distintos sectores, en especial entrerrianos, para que se habilite el canal de servicio como una nueva forma de conexión, vía agua, Del Mastro respondió que "hasta que no se termine la obra, estará cerrado". Algo que ya había adelantado a La Capital el año pasado.
Sin embargo dejó abierta una posibilidad. "No excluyo ninguna propuesta una vez que se habilite el puente", expresó. De la misma manera lo hizo cuando se le preguntó si existían intereses desde la empresa para explotar servicios complementarios al trazado vial.