Hammerly dijo que seguirá el ajuste en la Legislatura

Aseguró que habrá jubilaciones anticipadas y que la delegación Rosario será eliminada

Atilio Pravisani

Tras ser reelecto ayer como presidente de la Cámara de Diputados, Alberto Hammerly se preocupó en asegurar que proseguirá el ajuste legislativo con la puesta en marcha de jubilaciones anticipadas, además de los retiros voluntarios, y adelantó que prácticamente desaparecerá la delegación Rosario de la Legislatura provincial, que cobija nada más y nada menos que a 150 agentes de planta permanente.
El diputado provincial, hombre de confianza del gobernador Carlos Reutemann, anticipó luego un ahorro de cinco millones de pesos ("ya el año pasado ahorramos otros cinco millones", aclaró) para el presupuesto de este año. Además, anunció que muy posiblemente en este nuevo período ordinario se produzca la desvinculación financiera (no así operativa) de la Defensoría del Pueblo del Poder Legislativo, con lo que se sumaría una nueva baja de algo más de cuatro millones de pesos al presupuesto legislativo.
Actualmente la dotación permanente de la Cámara de Diputados asciende a unos 450 agentes de los cuales 150 pertenecen a la delegación de Rosario, cuyo edificio será desocupado y se habilitará uno mucho menor para reuniones de los presidentes de bloques y un mínimo de empleados.
Actualmente se está elaborando un proyecto de jubilación anticipada, pero que para evitar el desfinanciamiento de la Caja de Jubilaciones contempla la posibilidad de un fondo compensador para los aportes patronales y los del personal.
Hammerly fue votado por todo el arco político de la Cámara de Diputados, con la sola excepción de los dos legisladores de la democracia progresista, que se abstuvieron.
El resto de la Alianza lo votó, incluso con elogios hacia su gestión, pero en cambio no sucedió lo mismo con Liliana Meotto, quien sólo fue apoyada por el bloque oficial, aun cuando Angel D'Ambrosio se encargó de aclarar que la decisión no tenía carácter personal y sí en cambio principista, ya que tanto ellos como el radicalismo usandizaguista entendían que la vicepresidencia primera debía ser adjudicada a la oposición.
La sorpresa fue finalmente la designación de Raúl Molinas para la vicepresidencia segunda, si se tiene en cuenta que ese cargo había sido rechazado por la oposición el año pasado. Sin embargo, en esta oportunidad Eduardo Galaretto se encargó de proponerlo y de esta manera la conducción de la Cámara baja quedó en manos del reutemismo y del usandizaguismo, con lo cual se puso mucho más a tono con la realidad política provincial, reforzada por el triunfo de Convergencia el domingo último.

Hammerly resultó electo presidente de Diputados.