Hermes Binner admitió ayer la posibilidad de competir por la Intendencia de Rosario con Horacio Usandizaga, flamante ganador de las internas del radicalismo. Pese a que el jefe comunal observa como algo muy lejanos los comicios del 2003, la pública declaración del Vasco de intentar retornar al Palacio de los Leones obligó a Binner a reposicionarse frente al electorado rosarino.
"Puede ser", contestó Binner cuando se lo consultó sobre una eventual disputa con Usandizaga. Tampoco descartó dar pelea en la Gobernación. En ambos casos, desde el campamento socialista hay sobrado optimismo para pelear ambos frentes cuando llegue el momento de optar por una u otra alternativa.
"Si salimos a la cancha es para ganar los partidos", graficó en argot tribunero a La Capital un hombre de extrema confianza de Binner. Con esta afirmación, el dirigente del PSP dejó en claro que no le temen a la candidatura del Vasco, y muchos menos a cualquier político justicialista que bendiga el gobernador Carlos Reutemann en caso de que éste no busque su reelección por la vía de la reforma constitucional en la provincia.
Es más, cuando Usandizaga blanqueó ante La Capital su sueño de volver a ser candidato a intendente en el 2003, Binner acusó recibo del mensaje y realizó un provocativo contragolpe: "A Usandizaga le gano fácil". Luego se llamó a silencio.
La interna radical que se realizó el pasado domingo no pasó inadvertida, antes y después, por los estrategas de la política pesepista. Como el propio Usandizaga reconoció minutos después de haberse asegurado el triunfo: si caía derrotado en Rosario (su principal bastión electoral) hubiese perdido legitimidad para presentarse como candidato a la Intendencia. Eso, acorde a sus pretensiones, le interesaba mucho más que permanecer en el Senado de la Nación por el voto directo de la ciudadanía.
Operativo retorno
Al revalidar sus títulos como el radical más votado por los rosarinos, el camino se le hace más llano, aunque habrá que ver cuáles serán las secuelas que dejará entre sus adversarios vencidos para que se encolumnen detrás del "operativo retorno" a la Intendencia, que abandonó en 1989 antes de cumplir con el mandato popular.\La estrategia del Vasco es, precisamente, regresar por la puerta mayor al Palacio de los Leones y obligar a Binner a postularse para la Gobernación en vez de procurar un tercer mandato como jefe de la segunda ciudad del país.\Otro de los elementos que mensuran los pesepistas es la forma en que jugarán los distintos sectores internos de la UCR si la pelea de fondo en Rosario que se vislumbra es, finalmente, Binner versus Usandizaga.\En los papeles, hoy el principal aliado que tiene Binner dentro del centenario partido es el sector que lidera Angel D'Ambrosio: acuerdo que abrocharon en las elecciones legislativas del 99.\Pero se sabe que en política las sumas sobrepasan los cálculos lógicos. Días atrás Binner logró descomprimir la delicada situación que se le había planteado con el transporte público de pasajeros gracias a un acuerdo con el bloque de concejales de Convergencia, quienes, antes de eso, siempre asumieron una actitud hipercrítica hacia la gestión binnerista. "Nos vamos a sentar a conversar con la UCR", sostienen ahora los socialistas populares.