Demoras en el trámite ante la Justicia civil y comercial

La agudización y agravamiento de los problemas de funcionamiento de los juzgados del fuero civil y comercial de Rosario fue el tema central que analizaron el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la provincia y miembros del directorio del Colegio de Abogados local. La audiencia con el ministro Rafael Gutiérrez fue solicitada con carácter de urgente por la institución profesional rosarina, que preside Gustavo G. M. Lo Celso.
En la reunión, los abogados requirieron soluciones al problema de la sobrecarga de los juzgados sobre la base de que, según informaron a su término, "el diagnóstico ya está definido y probado". En ese sentido hicieron entrega de un estudio estadístico en el cual se demuestra que, en el quinquenio transcurrido entre 1994 y 1999, se incrementó el ingreso de causas civiles y comerciales en un 50,2 por ciento, con lo cual le corresponden anualmente a cada juez 2.886 causas, que se suman a las que posee en trámite, mientras -como contrapartida- la planta judicial permaneció estable. En otras palabras, el fuerte aumento de la actividad judicial no fue correspondido con una adecuación equivalente de la infraestructura y del personal.
El cuadro de situación descripto para Rosario no encuentra correlato con lo sucedido en los Tribunales de la ciudad de Santa Fe. Al contrario, la estadística aportada a la Corte pone de relieve para ese mismo período una caída del número de causas en la capital provincial y un leve incremento de tan sólo el 6,2 por ciento en toda la primera circunscripción, lo cual fue interpretado por los letrados rosarinos como "otro dato de inequidad".
En función de estos y los demás resultados del estudio, y frente a la reiteración de los reclamos de solución para la aguda crisis, el Colegio de Abogados rosarino obtuvo -según informó en un comunicado- el compromiso del presidente del máximo tribunal de justicia de la provincia para instrumentar urgentes soluciones.
Según pudo saberse, los puntos centrales en examen son cuatro. El primero, la reasignación de personal para fortalecer los juzgados civiles y comerciales. El segundo, estudiar la creación de la figura de un prosecretario. El tercero, la incorporación de mayor soporte informático. Y el cuarto, considerado de sustancial importancia, trabajar con premura ante los poderes Ejecutivo y Legislativo para la creación de por lo menos tres nuevos juzgados en la circunscripción judicial rosarina.