La cúpula del Partido Demócrata Progresista (PDP) encontró una rotunda negativa ante dos cuestiones que ellos consideran vitales en la reforma política que encara el gobierno provincial: la derogación de la ley de lemas y la eliminación de las listas sábana. En una extensa reunión que mantuvieron con el ministro de Gobierno, Angel Baltuzzi, los demócratas progresistas sólo lograron arrancarle al funcionario el compromiso de revisar los puntos más conflictivos del proyecto que elaboró el senador justicialista Julio Gutiérrez para reformar el sistema electoral santafesino y cuya negociación con los partidos la está llevando adelante el titular de la cartera política.
El PDP tampoco logró consenso en su planteo de desvincular materialmente las elecciones provinciales de las municipales. "Pero vamos a seguir insistiendo en este punto", apuntó el secretario general pedepista, Alberto Natale.
Un resultado previsible del encuentro fue la coincidencia para limitar la duración de las campañas políticas, el destino de los fondos para costear el derrotero proselitista, incluido el tope de 30 días antes de la contienda electoral para los spot televisivos.
Con el cónclave de ayer con el PDP, Baltuzzi prosiguió con la ronda de consultas con los partidos políticos. Primero se reunió con los principales referentes de la UCR, le siguió el Partido del Progreso Social (PPS) y ahora le tocó el turno a la delegación de los demoprogresistas, encabezados por Natale, Carlos Caballero Martín, María Emilia Biglieri, Pablo Cardinale y Carlos Favario.
"Vení Carlitos, acercate a charlar con los periodistas", le insistió más de una vez Natale a Favario. Los gestos de cariño no alcanzaron para disipar una sensación inocultable: el clima de interna política que en estos momentos los tiene enfrentados.
Punto innegociable
Al igual que lo que ocurrió con los emisarios radicales, Baltuzzi no quiso poner en la mesa de discusión con los pedepistas la derogación de la ley de lemas. "Ese es un punto innegociable", le había dicho en su momento a los referentes de la UCR. Y ayer se lo reiteró a los demócratas progresistas, quienes vienen reiterando su oposición a esa modalidad electoral desde que se puso en práctica.
Los motivos de Baltuzzi son obvios. El gobernador Carlos Reutemann llegó a ocupar por primera vez el sillón de la Casa Gris gracias a esa ley. El propio Lole se encargó de reflejar su oposición a derogarla en forma reiterada, aunque siempre dejó una puerta abierta a esa posibilidad, pero siempre y cuando haya un amplio consenso de los partidos políticos. Hecho que por ahora no asoma en el horizonte, al igual que la posibilidad de impulsar una reforma constitucional en la provincia.
Baltuzzi adelantó que una vez que termine la conversación con los partidos políticos, el oficialismo mandará un proyecto "pulido" con todos aquellos puntos donde hubo coincidencias plenas. Todavía falta discutir la "ley Gutiérrez" con el Partido Socialista Popular (PSP), Acción por la República y la Ucedé.