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¿Imperfección de la democracia?

Encontrándonos en lo más profundo de la crisis económica, social, política y moral de nuestra historia, los representantes del pueblo discuten otorgar un margen de poder especial al Poder Ejecutivo nacional. Esto fue solicitado para disponer y encontrar medidas urgentes que nos permitan iniciar el camino de regreso a reencontrarnos con el país que nuestros padres y abuelos construyeron con trabajo y honestidad. En síntesis, un sector numéricamente importante de diputados y senadores, sospechados y calificados por la mayoría de los ciudadanos de corruptos, deshonestos, vividores, demagogos, etcétera, coartan la posibilidad de que hombres capaces (llámese Cavallo) puedan romper la cadena regresiva que la masa putrefacta del poder político ha armado a través de los últimos 50 años. Mientras tanto, viven abrazándose y compartiendo sectores de poder con quienes tienen la facultad de hacer todo lo contrario. Este es el caso de los Moyano y los Daer, quienes reunidos con sus cómplices paralizan el país en el momento que mejor les parece, produciendo daños irreparables al pueblo argentino. ¿Es esta la imperfección de la democracia, o acaso están buscando colocar a la Nación en la situación que estábamos cuando un hombre honesto como Ricardo Balbín, 48 horas antes del 24 de marzo del 76, dijo "yo no tengo la solución"?
Jorge Alberto Pafundi