Enojadísimo, casi fuera de sí, el vicepresidente primero de Boca Juniors, Pedro Pompilio, negó de plano el interés por contratar al delantero de Estudiantes de La Plata Ernesto Farías y sentenció que el tema "se trató con total impunidad, a cargo de mercenarios que tienen como único objetivo la búsqueda del dinero". "Me arruinaron el día. Son sólo mercenarios que tienen como único objetivo la búsqueda del dinero. Y actúan con total impunidad, sin un código de normativa o de procedimiento, amparándose en una plaqueta que les da la Fifa como agentes", se irritó. Varios medios se hicieron eco de un firme trascendido según el cual Pompilio llamó por teléfono a Farías para manifesarle el interés de Boca por contar con sus servicios lo antes posible. Pero Pompilio alertó que quien habló con el goleador se hizo pasar por él. "Esto es de una enorme gravedad. Me provoca desprestigio, pierdo credibilidad y autoridad moral, virtudes que cuido como un tesoro. Esto crea incertidumbre en el plantel. ¿Cómo se le explica al chico (Esteban) Herrera que es el sueño de todos los dirigentes? Estoy muy caliente. Me pusieron en un diálogo que no existió, es un disparate. Se hicieron pasar por mí. No voy a permitir que estos personajes nefastos jodan mi vida. Voy a pedir al club el derecho a admisión de toda esta gente. No conozco a ninguno que no le interese el dinero. Esto que me pasó es inédito. Conmigo no van a joder", concluyó. En tanto, un Boca con mayoría de suplentes jugará hoy en Santa Rosa un partido a beneficio contra General Belgrano de esa ciudad.
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