Año CXXXIV
 Nº 49.070
Rosario,
miércoles  28 de
marzo de 2001
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Se llevan tres pinturas de un consultorio médico
Fue en Presidente Roca y Rioja. Los ladrones ingresaron por la noche y huyeron sin ser advertidos

La policía investiga la sustracción de tres cuadros que estaban exhibidos en un consultorio médico del microcentro de la ciudad, uno de los cuales pertenecía al artista rosarino Julio Vanzo. El robo se produjo durante la tarde del miércoles pasado cuando regía la huelga nacional convocada por el sindicalismo disidente.
Los cuadros robados son "Descanso", de Vanzo; "El rancho del Salado", de César López Claro, y otro sin título perteneciente a Cocón. Las obras fueron sacadas de una casa antigua que funciona como consultorio de oculistas ubicada en la esquina de Presidente Roca y Rioja, cuyo propietario es el médico cirujano Mario Fideleff, actualmente retirado de la profesión.
Según datos aportados por Fideleff, quien adquirió esas obras en la desaparecida galería Raquel Real, el cuadro de Vanzo mide un metro por 80 centímetros y en el mismo se puede apreciar a un cellista sentado en actitud de reposo con su instrumento en la mano. En el caso de la obra de López Claro, se trata de un cuadro de unos 80 por 60 centímetros. Mientras que el restante, medía un metro 20 de ancho por 90 de alto.
Las obras estaba colgadas en la pared del piso superior de la casa. La persona que ingresó al lugar debió ser alguien de contextura física pequeña, ya que se comprobó que entró por una de las ventanas que dan a la calle. Las barras de hierro fueron dobladas, rompieron un vitraux e hicieron "saltar" la falleba.
El o los ladrones trabajaron pacientemente sobre los marcos, ya que sólo se llevaron las telas y dejaron el resto de los cuadros sobre la pared. Fideleff señaló que en el caso de la obra de Vanzo, "fueron a buscarla directamente porque estaba en una habitación distinta a la del resto y no tocaron ninguno de los otros cuadros".
Con relación al valor monetario de las obras, Fideleff no pudo precisarlo, aunque aclaró que "exagerando se podría llegar a pedir unos 18 mil dólares, pero no creo que alguien esté dispuesto a pagar tanto".
Para el médico, los autores del robo actuaron por "encargo de algún aficionado a la pintura", pero volvió a relativizar el valor de las obras.


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