Rodolfo Montes
En sólo 48 días de trabajo, Cuatro Cabezas, la productora de Mario Pergolini, América TV, Cablevisión y Sky Televisión Satelital, transformaron un descampado ruinoso de cinco hectáreas, en el bajo San Isidro, en una casa donde vivirán 12 personas, más un bar con todas sus instalaciones. Total, casi mil metros cubiertos. Allí tomará vida "El bar", un programa televisivo sobre una idea ingeniosa, aunque no escape a la clasificación de reality show, esa opaca moda mundial que los argentinos no paran de comprar.
Andy Kusnetzoff será el encargado de conducir "El bar", que comienza mañana a las 21 por América TV, pasando a ocupar un lugar dentro de la imparable oleada voyeurista que domina la televisión.
Además de la hora diaria de lunes a sábados, "El bar", que le dará un premio de 100 mil dólares al único sobreviviente de los doce participantes, podrá ser visto las 24 horas por canal 11 de Cablevisión y por canal 188 de Sky. En esta versión de show de realidad, además de los 12 miembros del equipo inicial que se irá erosionando en uno semana tras semana, también cuentan los clientes del bar. Será cualquier hijo de vecino que decida ir a tomarse unos tragos al boliche y ponerse, claro, bajo la constante vigilancia de las cámaras. Los parroquianos serán atendidos por los seguramente ya famosos concursantes, produciéndose una interacción impredecible.
"La base de «El bar» es distinta a todos los demás reality shows. Nosotros tendremos un grupo de personas que tendrán que saber funcionar como empresarios para lograr que el bar funcione, sea rentable, esté bien atendido y demás. No tendremos a la gente tirada por ahí hablando todo el tiempo de sus dramas personales", dijo el ex notero estrella de "Caiga quién Caiga" a Escenario.
-¿Cómo fue el criterio de elección de los participantes?
-Se presentaron 6.000 personas. Buscamos que sean comunes y variadas. La idea no fue buscar tipos lindos, ni chicas que calienten la pantalla. Algunos fueron elegidos por cualidades histriónicas, otros porque creemos que le falta una chaveta y pensamos que eso puede ser divertido. Verán todo tipo de gente porque creemos que en el siglo XXI ya no se puede discriminar a nadie. Buscamos gente que no sean modelitos tipo "Verano del 98"; tenemos un gordo, tenemos personas con distintas culturas que no fueron elegidas para que terminen como movileros de los programas de la tarde.
-¿Cómo nació el proyecto?
-Con América nos sumamos en un momento que la gente de Ideas del Sur lo estaba intentando comercializar en Europa. Nos gustó el formato, y lo tomamos porque no apuntamos a un experimento genético del tipo "a ver cuando todo el mundo se termina agarrando a las trompadas". Creemos que tiene otro gusto que esos ciclos que espían la vida de la gente.
-¿Cómo imaginás que plasmará en la pantalla esta idea donde varios planos de realidad se desarrollan de forma simultánea, sustituyendo lo narrativo?
-Uno de los comerciales que pasamos dice: "¿Cuántas veces tuviste ganas de decirle al actor de la película «esa mina no te conviene» por ejemplo?". En "El bar" vas a poder ir y decírselo. Será una mezcla de todo, gente que trabaja, gente que hace las compras, gente que limpia, que administra, otro que recibe un sueldo. Que el público pueda venir al bar, ver, tocar, sentir el olor de lo que está pasando hace una diferencia total con todas las demás propuestas.
-¿Cómo se financia el bar?
-Tendrán un sueldo y depende de la recaudación que vayan haciendo podrán invertir, traer grupos a tocar por ejemplo. Por otro lado a medida que se vayan eliminando participantes podrán contratar empleados para hacer el trabajo y pagarles con parte de la recaudación.
-¿Cómo será el modo de eliminación de participantes?
-A mitad de semana cada miembro del grupo va a dar un positivo y un negativo a dos compañeros y argumentará el motivo. El que sume más negativos es uno de los dos candidatos a irse, el otro lo elige de manera unipersonal aquel que tenga mayor cantidad de positivos recibidos. Surgidos los dos candidatos a abandonar el lugar, en el programa del día sábado, que denominamos "La gala", directamente la gente vota telefónicamente o vía mails.
-¿Cómo es tu conducción?
-De algún modo estaré todos los días, pero específicamente voy a conducir La gala" de los sábados donde despedimos a un participante y analizamos la semana en cuanto a actitudes y conductas. Desde el primer momento que lo vi me gustó. Creo que es un crecimiento como conductor para mí.
-¿Se respetará la estética tradicional de Cuatro Cabezas o el público se va a encontrar con algo distinto?
-Entiendo que todo lo que salga de Cuatro Cabezas tendrá las señales propias de una manera de hacer televisión. Se trabaja de una forma definida en cuanto a la edición, que es una preocupación permanente que tenemos. Nosotros sabemos trabajar de una forma y esperamos poder encontrarle una vuelta para poder relatar esto todos los días con algo original, para eso hay montados oficinas donde se editarán los materiales para el compacto que va todas las noches.
-¿Qué esperás en cuanto a la respuesta del público que se llegue a tomar algo al bar?
-Lo único que sugerimos es que nadie venga "de trampa" a este lugar, porque se va a enterar todo el mundo.
-¿Qué tipo de apoyo previeron para asistir a los participantes y qué limite se plantea en cuánto a las imágenes a mostrar?
-El apoyo que haga falta va a estar. En cuanto a qué mostraremos vamos a respetar el horario de protección al menor. No nos interesa mostrar gente desnuda, todos conocemos como es una persona desnuda y en cuanto al sexo, sugerimos que por unos pocos pesos hay un canal exclusivo que pasa sólo escenas eróticas.
-¿Cómo definirías lo más atractivo que tiene el proyecto?
-El hecho de juntar distintas culturas, distintas personas que nunca se hubieran juntado en esta micro sociedad que hemos armando. Además de las múltiples historias superpuestas que puedan suceder a partir de la presencia del público. Esto es imposible guionarlo ni de controlarlo. No es una isla donde más o menos podés dirigir con la edición hacia donde vas con la historia. No vamos a poder llevar la historia para el lado que se nos ocurra por más edición que hagamos; en los otros reality show sí podés orientar desde la edición.
-¿Cómo funcionará el bar para el público?
-Los lunes va a ser de descanso. Los martes y miércoles de 19 hasta la una. Los jueves y domingos hasta las dos y los viernes y sábados hasta las cuatro.
-¿Porqué creés que se expande el fenómeno reality en la televisión?
-Veo que los famosos ya no están de moda y no ocupan tanto el centro de la escena, ya se sabe casi todo de ellos. Ahora la tele recorre un camino inverso: primero se mete en la intimidad del personaje y después tal vez lo haga famoso. Aunque esa lógica no es válida para "El bar", porque no buscamos modelos para luego proyectarlos a otros espacios de la televisión.
-¿Qué pasará con la casa cuando el programa llegue a su fin?
-Estos son terrenos que pertenecen a la municipalidad de San Isidro. El acuerdo fue que nos facilitaban el lugar y que nosotros dejamos todas las instalaciones cuando nos retiremos, la casa construida y el terreno mejorado.
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La Ciudad
