Lima. - El gobierno peruano aseguró que el cerco para capturar al prófugo ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos se va estrechando. "El cerco se va ajustando. La vigilancia del ministerio del Interior y concretamente del ministro del Interior (general de policía Antonio Ketin Vidal) es muy grande", dijo Javier Pérez de Cuéllar, canciller y jefe del gabinete. Además, Montesinos sufrió otra derrota judicial, al anunciar quien fuera uno de sus grandes testaferros que dirá todo lo que sabe sobre los manejos ilegales de su jefe a la justicia peruana.
"Como todos sabemos, Vidal tiene una experiencia extraordinaria en la materia y no hay un solo día en que no conversemos sobre los avances" en la búsqueda de Montesinos, dijo Pérez de Cuéllar. En septiembre de 1992 Vidal, como jefe de la Dirección Nacional Contra el Terrorismo, dirigió la captura de Abimael Guzmán, líder del grupo guerrillero maoísta Sendero Luminoso.
Pérez de Cuéllar, al declinar entregar antecedentes en el caso Montesinos, manifestó que "en lo que se refiere a esta investigación, cualquier indiscreción de nuestra parte no haría sino ayudar al prófugo".
"A veces se da la impresión de que no se está haciendo nada. Pero yo les puedo asegurar que se usan todos los medios clásicos en las investigaciones policiales", explicó en una entrevista de radio.
Recientemente Pérez de Cuéllar dijo que Montesinos estaría en el norte de Sudamérica.
Según el ex presidente de Venezuela Carlos Andrés Pérez, el fugitivo se hallaba en su país "protegido por el dictador Hugo Chávez. Los delincuentes se juntan y se protegen", aseveró Pérez, un líder político cuya decadencia abrió paso al triunfo de Chávez.
Durante el gobierno del destituido presidente Alberto Fujimori, Montesinos manejó el omnipotente Servicio de Inteligencia Nacional.
Cayó en desgracia cuando el 14 de septiembre una televisora limeña transmitió un video donde aparece sobornando a un legislador, lo que precipitó del derrumbamiento de Fujimori y su gobierno.
El otrora todopoderoso ex asesor es buscado para su juzgamiento por enriquecimiento ilícito, narcotráfico, corrupción de funcionarios, tráfico de armas y lavado de dinero, entre otros delitos.
Otro golpe al montesinismo
Como "un duro golpe para la mafia" calificó el periodismo peruano la detención de Juan Valencia Rosas, uno de los dos principales testaferros del prófugo ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos y que se entregó anoche a las autoridades, agobiado por la persecución.\"He venido a colaborar con la justicia. Voy a decir mi verdad, a esclarecer todo. Estoy decepcionado de Montesinos", dijo Valencia Rosas tras presentarse ante el principal juez del caso, Saúl Peña Farfán, quien de inmediato lo envió a la cárcel.\Según múltiples investigaciones, el presunto testaferro, de 46 años, movió millones de dólares obtenidos ilícitamente por la red político-criminal, creó numerosas empresas fantasma y controló la caja de pensiones policial-militar, una institución financiera que estuvo al servicio de la organización.\Dentro de la estructura del grupo, Valencia Rosas era tan o incluso más importante que Alberto Venero, el otro gran testaferro que está preso en Lima después de ser extraditado desde Estados Unidos.\Entre otras cosas, figuraba como propietario de la casa en que estuvo Montesinos como clandestino en Lima antes de salir del país y de la lujosa residencia de verano que se convirtió en el búnker del que fuera poderoso asesor presidencial. Se estima que el testimonio de Valencia Rosas será determinante para seguir desentrañando los alcances de la mafia.