La centenaria institución, que lidera el ranking de depósitos y préstamos del sistema financiero, fue objeto en los últimos años de opiniones encontradas sobre si debe continuar en el ámbito estatal o seguir el camino de otras empresas que pasaron a manos privadas en la década pasada. El último ministro de Economía del menemismo, Roque Fernández, planteó en su momento la necesidad de incorporar capital privado en el Nación, posición que en secreto fue respaldada por miembros del Banco Central, que consideraban que la ayuda financiera en emergencias debe hacerse por partidas contempladas en el presupuesto, y no a través del banco. El entonces presidente del banco, Roque Maccarone, se opuso a la iniciativa de Roque Fernández y el tema pareció definitivamente cerrado cuando el presidente Fernando de la Rúa, al poner en funciones a Chrystian Colombo al frente de la institución, aseguró que el Nación no iba a ser privatizado. Lo mismo se dijo cuando asumió su actual presidente de directorio, Enrique Olivera, y ahora el tema vuelve al candelero a partir de versiones que indican que algunos miembros del actual equipo económico impulsan la privatización de la entidad.
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La Ciudad
