Masivo repudio a ETA en el País Vasco

Bilbao. - Unas 60.000 personas, según un cálculo realizado por la policía, asistieron en Portugalete, cerca de Bilbao, País Vasco, a los funerales del policía asesinado en un atentado en Hernani el jueves, que fue atribuido a la organización separatista vasca ETA, informó la prensa.
La iglesia en la que se celebró la misa en memoria Iñaki Tororika, el policía regional vasco asesinado, no alcanzó para albergar a las miles de personas que se dieron cita al oficio religioso, durante el cual el obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, calificó el atentado de "radicalmente inmoral".
Después de la misa, familiares y amigos de Iñaki Tororika, de 25 años, marcharon al cementerio para enterrarlo en la intimidad, en tanto miles de personas desfilaban en silencio por las calles de Portugalete, detrás de una pancarta en la que se podía leer "Por la libertad y la Paz. ETA no".
Miembros de todos los partidos políticos, excepto Euskal Herritarok (EH), nacionalistas cercanos a ETA, participaron en la manifestación.
Iñaki Tororika murió el jueves a la noche en Hernani por las heridas sufridas tras la explosión de un coche bomba, que causó también heridas leves a otro agente de la Ertzaintza (policía vasca).
Los dos hombres cayeron en una trampa, cuando acudieron al lugar tras una llamada que advertía sobre incidentes de "kale borroka", guerrilla urbana de jóvenes independentistas cercanos a ETA. Así los agentes se acercaron a una rotonda, donde el coche bomba bloqueaba una calle, y al acercarse al vehículo se produjo la explosión. El policía fallecido se convirtió en el décimo miembro de la Ertzaintza asesinado por ETA desde la fundación en 1982 de ese cuerpo de policía regional, símbolo de la autonomía que tiene el País Vasco dentro de España.
En tanto, la policía francesa detuvo ayer en un retén carretero a dos supuestos miembros del grupo separatista Patria Vasca y Libertad (ETA), quienes serán interrogados, informaron investigadores. La policía cerca de Montfort-en-Chalosse, en el País Vasco francés, descubrió que los sospechosos estaban armados y portaban identificaciones falsas.
Un sospechoso, Zorion Zamacola, ha sido sentenciado a prisión en ausencia por las autoridades francesas, debido a actividades separatista, informó la policía. Se cree que Zamacola ha sido el brazo derecho de Francisco Javier García Gaztelu, ex líder de los comandos de ETA, arrestado el mes pasado en el suroeste de Francia. Las autoridades dijeron que el otro detenido es Etchevarría Lander, de 30 años.
La ETA ha matado a unas 800 personas desde que inició su campaña en 1968 por un estado vasco independiente, vinculando partes en el norte de España y suroeste de Francia.
También ayer, otro sospechoso de la ETA, Gregorio Vicario Setién, fue transferido a París desde Grenoble, donde fue interrogado por la policía.