Que un 77 por ciento de los televidentes del interior del país esté a favor de un cambio de la oferta televisiva, tanto abierta como por cable, es para el Comité Federal de Radiodifusión (Comfer) una verdad de Perogrullo. Resultados de una reciente encuesta realizada por el ente, a la que accedió La Capital, reflejan que "existe una fuerte demanda de programación local" por parte del público. Y este reclamo tiene en la escasez de producción propia de canales abiertos su razón de ser para el Comfer. Según un estudio sobre la programación que emiten los canales del interior, sólo "un 13 por ciento es producción propia". La mayoría de la oferta (un 72 por ciento) proviene de canales abiertos de Capital Federal (básicamente 11,13 y 9).
Los pedidos y críticas recabados en el sondeo telefónico, al que respondieron 800 personas mayores de 12 años de todas las provincias argentinas, no terminan allí. La mayoría de los televidentes solicita, también, "más espacios culturales", repudia sobre todo las escenas de "sexo explícito, violencia y las que contienen lenguaje vulgar", y en consonancia, expresa que esos tópicos "se excluyan del horario de protección al menor".
No obstante, no todas son pálidas para la TV. Al momento de las evaluaciones, la mayoría de quienes acceden sólo a la televisión abierta calificaron a la programación actual de "buena". Y aquellos que miran cable o tevé satelital fueron aún más benévolos. Dijeron que es "muy buena".
El estudio, "Percepción de las características de las emisiones televisivas en la población del interior del país", constituye la segunda etapa de un proyecto de investigación que se inició en el área de Capital Federal y el conurbano bonaerense en diciembre del 2000 y que ahora se centró hacia las afueras de la General Paz.
Los teleespectadores tuvieron que expresar detalles y sentar posición sobre 12 aspectos técnicos. Contar cómo recepcionan la señal de TV en el hogar y con quién ven habitualmente televisión, evaluar la programación, señalar las carencias temáticas, discutir sobre el horario de protección al menor y los mecanismos de control, y opinar sobre la posibilidad de aumento de la oferta televisiva, fueron algunos de los temas sobre los que se explayaron.
Perfil de los teleadictos
La encuesta no sólo refleja las demandas de los televidentes, sino también su perfil y sus gustos de programación.
La mayoría (61%) accede a los programas a través de señales de cable, sistema que tiene más penetración a medida que es más alto el nivel socioeconómico del hogar. Esquema que también se observa en cuanto a la TV satelital.
Quienes conforman el segmento de telespectadores "más críticos" son los mayores de 50 años (los que a su vez son quienes demandan mayor espacio para la cultura), los varones y los de mayores recursos económicos.
Lejos de "los críticos", los jóvenes (menores de 20 años) piden más programas deportivos, recitales y entretenimiento.
Al momento de señalar las cosas que deben cambiar, las escenas de sexo explícito y de sensualidad, las de violencia y el lenguaje vulgar encuentran entre sus detractores a muchas mujeres.
Esos tres tópicos -sexo, lenguaje y violencia- son los que, según los telespectadores, "no respetan el horario de protección al menor".
La postura antisexo, sin embargo, no se reflejó cuando se preguntó sobre los programas "sólo para adultos". Un 62 por ciento de los televidentes se mostró indiferente a la existencia de esa programación.
La mayoría se inclina por instancias de control de contenido externas a los propios canales y está a favor de que el visto bueno sea dado por un organismo estatal. Además, a un 43 por ciento le parece "muy o bastante necesario" que exista un canal del Estado, pero para los sectores más críticos esta proporción se eleva aún más alcanzando un 55 por ciento.
Por más producción local
El ítem de la encuesta que apuntó a ver cómo se evaluaba un posible aumento de la oferta televisiva reflejó una "fuerte predisposición positiva". El 76 por ciento del público dice que es preferible que haya más canales de aire, opinión que aumenta al 82 por ciento donde se recibe un solo canal.
Pero el documento también advierte que "el promedio de producción de la totalidad de los canales del interior del país no supera el 13 por ciento de producción propia, y esto significa falta de trabajo para técnicos, operadores, directores, actores, periodistas, y para todos aquellos que están ligados a la creación en la televisión".
El Comfer realizó esta encuesta en el marco de la creación de una nueva ley y Plan Nacional de Televisión que apunta a "crear más frecuencias administradas por el Estado para que los habitantes de todas las provincias tengan el mismo acceso a la información gratuita que posee el habitante de la ciudad de Buenos Aires; ya que hoy, la variedad informativa en muchas provincias llega sólo a través del cable, y no por medio de la televisión abierta" .
Esta argumentación fue expresada en el informe de un estudio previo (sobre 11 mil horas de programación, de 28 canales del interior del país y cinco de Capital Federal) que adjuntaron a la encuesta las autoridades de la entidad.
Allí sostienen que el último Plan Nacional de Televisión se realizó hace 40 años cuando se licitaron las "muy pocas" frecuencias que hay actualmente en todo el país.