Gaza. - Los combates entre palestinos e israelíes se reanudaron a gran escala ayer en la franja de Gaza, cuando un oficial de la Fuerza 17, la guardia presidencial del líder palestino Yasser Arafat, fue muerto por el disparo de cohetes desde dos helicópteros de combate de Israel contra el auto en el que viajaba. Otros helicópteros bombardearon un edificio de la Fuerza 17 y un adolescente palestino de 14 años murió en Gaza. Tanques israelíes habrían abierto fuego contra campos de refugiados Khan Younis, y los intercambios de fuego entre ambas partes fueron intensos ayer en toda la franja. Con estos ataques de helicópteros, Israel vuelve a una modalidad operativa dejada meses atrás, al inicio de la ola de violencia que estalló a fines de septiembre. El premier Ehud Barak felicitó al ejército por la operación. Israel dijo que el dirigente palestino fallecido actuaba en favor de la guerrilla islámica Hizbolá, de Líbano. Un portavoz del ejército israelí confirmó que helicópteros de combate mataron a Masud Ayad, de 47 años, al atacar el vehículo en el que se movilizaba por la ciudad autónoma de Gaza, y que en el ataque resultaron heridos sus cuatro acompañantes. Casi al mismo tiempo, helicópteros israelíes bombardearon un cuartel general de la Fuerza 17, perteneciente al movimiento Al-Fatah, formado por los hombres más cercanos a Arafat, su líder y presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Según el portavoz del ejército israelí, el oficial palestino muerto colaboraba con el grupo integrista libanés Hizbolá (Partido de Dios), responsable de innumerables ataques con cohetes contra aldeas israelíes en la zona de frontera con Líbano. El portavoz israelí también acusó a Ayad del lanzamiento de granadas contra un asentamiento judío, Netzarim, en el sur de Gaza. El portavoz militar concluyó que "Ayad planeaba secuestrar a soldados israelíes y estaba implicado en el contrabando de armas y drogas para organizaciones terroristas". Poco después se reanudaron los enfrentamientos entre palestinos y soldados israelíes en las cercanías del asentamiento judío de Nevé Dekalim, de la franja de Gaza, donde resultó herido uno de sus habitantes.
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