Jerusalén. - El primer ministro israelí electo, Ariel Sharon, volvió a ofrecerle ayer al saliente premier Ehud Barak ser su ministro de Defensa, en tanto que los laboristas exigieron al líder derechista que se comprometa a no crear más colonias en los territorios palestinos como condición para su participación en un gobierno de unidad.
Ambos líderes se reunieron durante dos horas en la oficina de la jefatura de gobierno en Jerusalén, en el primer contacto oficial luego de las elecciones del martes, en las que Sharon venció a Barak por 25 puntos de diferencia. El primer ministro electo reiteró su oferta a Barak para que se incorpore a su gobierno como ministro de Defensa, propuesta que en principio fue rechazada, aunque el líder laborista no descartó la formación de un gobierno de coalición si es que Sharon cumple determinadas condiciones.
Exigencias para la unidad
Los laboristas quieren que cualquier programa conjunto incluya un compromiso de no crear nuevas colonias, aceptar la creación del Estado palestino desmilitarizado y anular la elección directa del primer ministro en Israel, que rige desde 1996. Esas exigencias fueron formuladas durante una reunión del buró político del Partido Laborista en Tel Aviv, en la que participaron Barak y el también el ex primer ministro laborista israelí, Shimon Peres.
La prensa local informó que, además de la cartera de Defensa, Sharon ofreció al laborismo el Ministerio de Asuntos Exteriores o el de Finanzas. Mientras tanto, el equipo del líder derechista que negocia la formación de una coalición de gobierno completó ayer su primera ronda de contactos con el Partido Nacional Religioso (PNR) y el Jerut, potenciales aliados de la derecha.
Asimismo, el Likud mantendrá consultas con el frente pacifista Méretz y con la lista sindicalista Am Ejad. Pero lo que el equipo partidario espera, fundamentalmente, es que los laboristas respondan a sus propuestas antes de concertar con ellos una nueva ronda negociadora.
El laborismo también condiciona su posible entrada en un gobierno de unidad nacional a que los partidos Moledet (Patria) e Israel Betenu (Israel es Nuestra Casa), ambos de extrema derecha, queden fuera de la coalición.
Barak, quien está al frente de las negociaciones junto con Peres, ya había dicho que él no formará parte del gobierno de Sharon, y que piensa tomarse un período de descanso antes de decidir su futuro político. "El pueblo quiere unidad y recomiendo escucharlo, yo ya volveré cuando las condiciones estén más maduras", afirmó el primer ministro saliente en una reunión del Comité Ejecutivo laborista.
Con esta reunión se inició formalmente el traspaso de poderes a Sharon, quien tiene hasta 45 días -a contar desde la fecha de los comicios- para formar su gabinete y jurar el cargo en el Parlamento. Fuentes allegadas al primer ministro electo indicaron que si en las próximas dos o tres semanas no logra formar un gobierno de unidad nacional, Sharon jurará su cargo con una alianza minoritaria de partidos de derecha y reservará dos ministerios hasta que el laborismo tome una decisión.