El ataque a piedrazos a tres colectivos de pasajeros de larga distancia derivó en un tan violento como confuso tiroteo cuando los supuestos agresores se enfrentaron con la policía en la zona sudoeste de la ciudad. En medio de la balacera murieron dos de los atacantes y un agente del Comando Radioeléctrico resultó herido de gravedad. En tanto, tres pasajeros sufrieron lesiones leves y, tras ser atendidos en un hospital, siguieron viaje.
De acuerdo a la información policial, los atacantes fueron sorprendidos por los efectivos en el mismo lugar del hecho y no pusieron en duda que fueran los autores de la pedrada ya que "su apariencia coincidía con la descripción brindada por los choferes" de los micros.
Voceros policiales indicaron que todo se inició cerca de las 4 de ayer en el puente que cruza la avenida de Circunvalación a la altura de Uriburu, cuando los internos 156, 184 y 187 de la empresa La Veloz del Norte fueron atacados a piedrazos. Los micros habían salido de Capital Federal y se dirigían a la ciudad de Salta. "La intención de los agresores puede haber sido que los colectivos se detengan para asaltar a los pasajeros", explicó una alta fuente de la Jefatura de la Unidad Regional II.
A raíz del ataque, dos de los colectivos resultaron dañados: el cristal del parabrisas de uno de los coches estalló en pedazos mientras que algunas ventanillas de otro micro fueron alcanzadas por las piedras. Por los tremendos impactos una mujer de 61 años y dos chicos que viajaban en uno de los colectivos resultaron lesionados.
Eugenia López, de la ciudad bonaerense de Pilar, fue alcanzada por una esquirla en el ojo mientras que Verónica Durán, de 16 años, y su hermano Darío, de 12, tuvieron cortes en los brazos.
Tras el ataque, los choferes de los tres micros se dirigieron a la agencia Fisherton Express, ubicada en Eva Perón (ex Córdoba) y Circunvalación, donde habitualmente suben pasajeros de Rosario. Allí, los médicos de una ambulancia del Sies atendieron a los heridos, y luego los trasladaron al Hospital Centenario. "Tenían lesiones leves porque fueron afectados por astillas de vidrio", explicó un vocero de ese centro asistencial.
Luego de dos horas, los pasajeros recibieron el alta médica y los micros continuaron el viaje. "Emparcharon con cartones los agujeros de los vidrios, encintaron todo y siguieron", comentó un empleado de la empresa La Veloz del Norte. El trabajador agregó que los ataques a los coches de la empresa son frecuentes. "Ocurren todos los días", aseguró.
Persecución y tiroteo
Pero poco antes de que los coches reiniciaran la marcha, uno de los choferes divisó el paso de un móvil del Comando Radioeléctrico y denunció el suceso. Entonces otra patrulla se dirigió hacia el puente desde donde habían sido atacados los micros y ante su presencia, los atacantes escaparon del lugar. "Cuando los policías llegaron, los agresores les dispararon y los agentes repelieron la agresión", explicó un vocero policial.
En el tiroteo, el agente Luis Nosrala recibió un balazo en el abdomen que le perforó el hígado. El policía, egresado de la última promoción de Centro de Instrucción en Destino, fue internado en la sala de terapia intensiva del Sanatorio Parque y anoche los médicos evaluaban la posibilidad de operarlo para extraerle el proyectil.
Los agresores abandonaron corriendo el lugar por una zona de quintas y de "plantaciones de soja", mientras el otro agente que se desplazaba en el móvil "pedía refuerzos". Así, en pocos minutos varias unidades del Comando Radioeléctrico montaron un operativo para detener a los agresores mientras una lluvia de balas atravesaba los descampados de la zona.
Los desconocidos entonces ingresaron en una villa que se levanta en bulevar Avellaneda entre Circunvalación y Uriburu y allí se produjo el último enfrentamiento: los agresores se introdujeron en un rancho y en medio del tiroteo cayó abatido uno de los atacantes mientras que el otro resultó herido de gravedad. Fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, donde falleció una hora después, mientras que el tercer atacante logró escapar.
Hasta anoche, los dos hombres abatidos no habían sido identificados, pero se trataría de personas, según el vocero, con antecedentes penales. "Tenían tatuajes en el cuerpo por lo que presumimos que eran delincuentes", dijo.
Por otra parte, los investigadores aseguraron que los hombres que murieron en el enfrentamiento son los autores del ataque a los micros. "Los rasgos físicos de los hombres que murieron coincidían con la descripción de los choferes", explicó una alta fuente de la Jefatura.
El vocero agregó que los agentes incautaron un revólver calibre 32, otro de calibre 22 y una carabina recortada que estaban en poder de los supuestos atacantes.
La Ciudad
