Aprendiendo a crecer

Argentino y un alentador 0 a 0 ante Almirante

Javier Parenti

Empezar a crecer es el desafío salaíto. Con pasos seguros, quizá cortos pero sabiendo que darlos le servirán para recuperarse de los duros tropiezos que tuvieron en el 2000. Y el 0 a 0 ante Almirante Brown es uno de esos importantes avances de esta nueva versión del equipo que dirige Oscar Díaz. Es cierto que sólo permitió sumar un punto y de local, pero también lo es que fue ante el segundo de la tabla de posiciones y candidato al ascenso, y que también se notó que los pibes ganaron en tranquilidad y no dieron esa sensación de vulnerabilidad de la temporada pasada.
El reinicio del torneo encontró a un Argentino distinto. Con una actitud más madura, aunque todavía convive con errores que debe aprender a corregir. Y empezó bien, esforzándose al máximo, animándose a pensar en el arco rival pero sin desprotegerse atrás. Por eso sacó el 0 a 0.
De arranque perdió la pelota y el mediocampo. Es que Almirante es un equipo diametralmente opuesto al salaíto. Con jugadores experimentados y un oficio para jugar en esta dura división de ascenso. Sin embargo, no tuvo la profundidad característica de su juego y su fuerte, el conocido pelotazo para el grandote Bazán Vera, sucumbió ante la pegajosa marca de Montú y la solvencia de Diego Corman, quien volvió para ser patrón en el fondo albo.
Con el correr del tiempo, el juego se emparejó. El partido se hizo trabado, sin emociones y jugado sin entrar en las áreas. Tanto que las únicas llegadas fueron un cabezazo de Cortalezzi tras un córner, dos intentos de Brown, y una corajeada de Luciano Tombolini que supo desviar el arquero visitante.
La parte final mostró a los de barrio Sarmiento mejor parados, más incisivos y con el aporte de categoría que le imprimió el Negro Ojeda, a pesar de su falta de ritmo. Pero el que no apareció fue Mellado, quien en lugar de ser su socio futbolístico se empeñó en hacer la personal y así demoró siempre los avances salaítos. Al mismo tiempo, Brown se iba cayendo físicamente aunque cada tanto avisaba que podía golpear.
Pero Argentino fue el que estuvo más cerca. La única vez que se juntaron Ojeda y Mellado, el diez la tiró apenas arriba, más tarde Felipe se confió en el área y su remate bien dirigido al palo izquierdo fue muy débil, como para que se luciera Negro Luqui. Y la respuesta de los dirigidos por Ricardo Calabria recién llegó en el final, en las únicas dos veces que falló la defensa. Primero con un cabezazo de Bazán Vera y después con una gran tapada de Barrios ante el remate de Rojas.
Aunque todo quedó en cero. El de un punto que conformó al Argentino en crecimiento y que sufrió Almirante, porque el líder Sarmiento se le escapó otros dos puntos.

Zabaleta perdió toda la tarde el duelo con Mellado.