El presidente de San Lorenzo, Fernando Miele, aseguró ayer que el gerenciamiento del fútbol del club otorgado a la empresa ISL, no es un deseo personal sino de todos los integrantes del club. "Todo se desarrolló en total normalidad. El gerenciamiento con ISL no es un objetivo personal, sino es para la gente del club, que lo quería desde hace dos años", explicó Miele en conferencia de prensa, luego de la asamblea de representantes. El organismo que representa a los socios azulgranas aprobó ayer el gerenciamiento, aunque la oposición insiste en que recurrirá a la justicia para volver a impugnarla. El polémico vínculo con la empresa suiza le reportará a la entidad la suma de 13 millones de dólares por año. Respecto de una nueva impugnación por parte de la oposición, Miele explicó: "Tenemos todos los instrumentos legales para que lo que está firmado no corra ningún riesgo de ser anulado". En tanto, Néstor Dafinitti, ex vicepresidente de Miele y ahora opositor, puso en duda la votación y manifestó que "la asamblea estuvo dentro de los términos legales, pero fue una inmoralidad". En esa asamblea no sólo se votó el punto 5 (firma del contrato con ISL), sino que también se aprobó el Balance del período 1999-00 que arrojó un pasivo de 22.900.000 dólares, y que 4 millones más que el anterior.
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