Bajo un cielo limpio y con temperatura ideal, el grupo rosarino La Semilla, Pepe Alegría y el show de los porteños de Las Sabrosas Zarigüeyas dieron el puntapié inicial de la temporada 2001 en el Anfiteatro Municipal Humberto De Nito. El espectáculo "Venga a bailar salsa al anfiteatro" fue aplaudido y bailado por unas 5 mil personas que abandonaron la vergüenza y se sumaron, con el baile, a los contagiosos ritmos caribeños. El espectáculo estuvo animado por Pedro Ercilio Giancerra y fue trasmitido en directo por LT3.
El show central estuvo animado por el combo Las Sabrosas Zarigüeyas que integran Matías Conte (voz), Sebastián Fucci (teclados) y Nahuel Conte (percusión) quienes sumaron para sus presentaciones en Rosario a los músicos Guido Martínez (bajo), Mariano Sanci (batería), Martín Laurino (trombón), Fabián Veglio (trompeta) y Juan Cruz de Urquiza (trompeta).
El momento de mayor fervor se vivió cuando la banda arrancó con el más sonado éxito de su carrera. Los primeros compases de "El muerto se fue de rumba" sirvieron para que todo el clima creado por La Semilla primero y Pepe Alegría y su conjunto después, hiciera eclosión entre los asistentes que menearon sus cuerpos tras superar pocas dudas.
La noche especialmente cálida fue el marco ideal para la propuesta con que se dejó inaugurada -un poco tardíamente- la temporada 2001, cuando enero ya transita por su segunda quincena. No obstante los habitués del lugar, que concurren con sus almohadones y hasta sus silloncitos para ver "qué hay", se sintieron acompañados por nutridos grupos de chicos que, sin inhibiciones, menearon el esqueleto al ritmo contagioso de los tambores.
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La Ciudad
