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Despojo a un instituto de historia

El presidente de la Nación ha demostrado una vez más que tanto él como la Alianza tienen un carácter unitario y discriminatorio del manejo del poder. Dicha afirmación tiene como fundamento el decreto Nº1.109, que despoja al Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Juan Manuel de Rosas de su carácter de "nacional". La razón que invoca dicho decreto para el despojo es "la racionalización del gasto público", sin advertir que dicho Instituto carece de planta presupuestaria, es decir no tiene planta funcional ni eroga sueldos escalafonarios, y los miembros de número del cuerpo académico son cargos honorarios a los que han arribado por sus trayectorias en el campo de la investigación historiográfica argentina. Por el contrario, dichos miembros del cuerpo académico efectúan pecuniarios obligatorios para el mantenimiento del Instituto Nacional, originándose la situación paradojal, ya que son ellos los que sustentan económicamente a la institución y no la Secretaría de Cultura y Comunicación, en cuyo pretexto de gasto se apoya el desafortunado decreto. Asimismo, el cesanteo por decreto de 40 personalidades con cargos honorarios, dedicadas de por vida al estudio de la historia argentina, sin previo aviso y sin siquiera darles las gracias, además de constituir un hecho irreverente y hasta agraviante, señala una actitud discriminatoria e intolerante de este gobierno.
Sergio Romano