Apostar y ganar. Acaso sea el deseo colectivo más soñado, que cobra dimensiones gigantescas a caballo de la implacable malaria cotidiana. Cuenta de ello fue el balance de utilidades de la Lotería de Santa Fe del año pasado: 33.440.000 pesos. Si bien las autoridades advirtieron que los datos no son los definitivos, indicaron que superaron en más de seis millones a los del 99 y también al último récord que se obtuvo en el 94 cuando llegó a los 31.984.743 millones. El director general del organismo, Enrique Angel Ucedo, señaló que el aumento de las ganancias obedecen "fundamentalmente" a la disputa que el Estado realizó en contra del juego clandestino y a una mayor inserción en el mercado nacional.
Las ganancias genuinas de la Lotería devienen de distintos porcentajes que deja cada uno de los juegos y también del azar cuando la banca gana, es decir cuando no hay grandes premiados.
El funcionario remarcó que la Quiniela es el juego que más dinero aporta a la recaudación estatal, en segundo lugar el Quini 6 y luego lo siguen el resto de las ofertas lúdicas.
"Hay tres sorteos diarios de Quiniela, y la provincia paga la apuesta 600 veces los días de semana y 700 veces los sábados", según Ucedo la recompensa es la más alta del país, ya que otras provincias ofrecen cuatrocientas veces la cifra ganadora apostada.
Esta situación disputa claramente a los levantadores de juego clandestino que pagan 700 veces la apuesta. Además de las alternativas de los sorteos, la posibilidad de zafar con algunas monedas resulta tentador para cualquiera.
Qué hacer con 40 centavos
"La persona que tiene cuarenta centavos sabe que con eso no hace nada y que si los apuesta puede zafar unos días", confió un avezado agenciero que prefirió no darse a conocer.
"Este resultado es altamente positivo analizando la actual recesión económica que da cuenta de una tendencia en baja en las recaudaciones de juegos de azar en el país", dijo el titular de la Lotería.
Las ofertas que maneja la Lotería santafesina son variadas y múltiples. A los diversos sorteos de Quiniela diaria, debe agregarse el Quini 6, el Loto, y la incorporación del Brinco en marzo pasado. Cada uno de los juegos, a su vez, tiene premios consuelo como pozos extras, o sorteos de las boletas de Quiniela no ganadoras además de los que propone cada agencia -viajes, autos, televisores y electrodomésticos- en función de captar clientela.
Ucedo también hizo hincapié en "los permanentes esfuerzos para actualizar y modernizar los productos ofrecidos para ganar un mayor espacio en el mercado nacional".
A modo de ejemplo nombró al Quini 6 como el juego de mayor comercialización en todo el país. "Hemos hecho permanentemente campañas promocionales y agregamos premios extras", dijo al explicar el fenómeno del Quini.
Con el mismo tenor resaltó que los billetes de lotería correspondientes a los gordos de Navidad y Año Nuevo pasados fueron los de mayor venta en la Argentina "a pesar de la caída en las ventas que estos juegos tienen a nivel universal".
Más allá de las tentadoras ofertas, Ucedo remarcó la campaña sistemática que se hizo desde la repartición para convencer al público para que apueste de modo oficial. "Se ha insistido entre los jugadores sobre la garantía y seguridad que brinda una institución estatal, además del destino solidario que se le dan a los recursos que genera", agregó.
Si bien el director del organismo no pudo precisar cuál fue el monto total de las apuestas en el 2000 que arrojó una ganancia de 33 millones para la provincia, admitió que fue importante.
"El juego es inherente al ser humano, siempre está jugando desde el principio de la historia, y el Estado intenta canalizar estas conductas", reflexionó.
Fondos solidarios
Las leyes provinciales estipulan que los fondos obtenidos por los juegos de azar deben repartirse en partes iguales a los ministerio de Salud y Educación, otro porcentaje se destina a municipalidades y comunas y al área de Deportes.
De este modo, Salud y Educación recibieron 14.150.000 pesos cada uno; Municipalidades y Comunas 4.350.000, y Deportes 725.000 pesos.
También las autoridades provinciales indicaron que la Caja de Pensiones Sociales ley 5.110, recibió durante el año pasado transferencias de fondos por 1.573.000, en concepto de aportes correspondientes al 10 por ciento de los primeros premios de la Lotería que no fueron vendidos.
"Es importante que el Estado sea monopólico en el manejo del juego, en primer lugar porque le da seriedad y también porque es una fuente importante de recursos genuinos que se destinan solidariamente", remató Ucedo.