El senador radical José María García Arecha pareció ayer preocupado ante la posibilidad de que el ex vicepresidente Carlos Alvarez acepte, finalmente, ser candidato para una banca en la Cámara alta por su distrito electoral, la ciudad de Buenos Aires. Creo que la vida política requiere grandes cambios y, entre ellos, señalar con claridad si uno aspira o no a un cargo, se quejó, impaciente, García Arecha, en velada alusión al líder del Frepaso, a quien desde el gobierno intentan convencer de que se postule para la elección de octubre. El senador radical, quien ya confesó sus deseos de pelear en los comicios legislativos por un nuevo mandato, reconoció que Alvarez es una figura que trasciende la ciudad de Buenos Aires pero, de inmediato, dijo que el jefe del Frepaso ya rechazó la oferta de ocupar un escaño en la Cámara alta. Yo me remito a las palabras de él. Uno mide la conducta de los demás por la propia. Si yo no aspiro un cargo, no lo aspiro; y si lo aspiro lo digo con transparencia y tranquilidad, dijo el senador, en un intento por sellar la discusión y asegurarse de que Alvarez no dará marcha atrás. García Arecha aclaró, para finalizar, que él no fue tocado ni mencionado por las denuncias sobre supuestas coimas en el Senado para aprobar la reforma laboral que reclamaba el gobierno de Fernando de la Rúa.
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La Ciudad
