Marcelo Castaños
La capacitación debe contemplarse como parte del trabajo del docente, y por lo tanto debe hacerse en el horario de clases. Si el ministro quiere hacerlo fuera de ese horario, que lo pague; de lo contrario, estaría imponiendo una sobrecarga laboral sin remunerarla. En estos términos, el secretario general de la Amsafé, José María Tessa, respondió al ministro de Educación provincial, Alejandro Rébola, quien expresó su intención de que los docentes asistan a cursos de capacitación fuera de los horarios de clase y en las vacaciones de invierno.
En diálogo con La Capital, Tessa consideró que el ministro mantiene una clara actitud confrontativa con el gremio, y vaticinó un año conflictivo.
En cuanto a la capacitación, opinó que no debe desligarse del proceso de trabajo. Hay que buscar mecanismos para que se haga en función de mejorar verdaderamente la calidad de la educación. La capacitación se tiene que hacer en el marco de la estructura educativa, dijo.
-¿Y qué diferencia hay con lo que plantea el ministerio?
-Que el ministro saca al maestro de la situación de aula. Cuando decimos que tiene que estar ligada a un proceso de enseñanza-aprendizaje, decimos que los capacitadores tienen que ir a las escuelas y trabajar con los maestros.
-Pero el cuestionamiento ministerial es a que el docente vaya a una instancia de capacitación y deje de dar clases a los chicos.
-El proceso de capacitación debe contemplarse como parte del trabajo, por lo tanto debe hacerse en el horario de clases. De lo contrario, generaría una nueva sobrecarga laboral en los maestros. Si el ministerio quiere generar esa sobrecarga, debe reconocerla y pagarla.
-¿Esta nueva propuesta ministerial forma parte para ustedes de la lógica del ajuste?
-Y ... cuando te generan una sobrecarga laboral sin pagártela, están ajustando.
-Otro planteo del ministro es que los maestros se capaciten durante las vacaciones de invierno, y argumenta que el receso es para los alumnos...
-Reglamentariamente, es para los alumnos. Habitualmente los maestros lo han usado como parte de su descanso. De todos modos, siempre ha habido cursos durante las vacaciones de invierno, y los docentes han asistido, porque tienen una ansiosa necesidad de capacitarse.
-Pero si reglamentariamente es para los alumnos, no le quedan muchos argumentos al gremio para pedir que el gobierno pague la asistencia a los cursos en vacaciones.
-En la práctica, las vacaciones siempre fueron para alumnos y maestros. Además, si el ministro está tan interesado en mejorar la calidad educativa, tiene que aumentar los salarios.
-¿Qué hay que esperar si el gobierno insiste con estas propuestas?
-Hay otras cosas más profundas. El ministerio quiere llevar adelante un proceso de ajuste, y eso es lo que determinará si se inician las clases. Febrero va a ser clave, habrá asambleas y se analizará la situación. Creo que se viene un año muy conflictivo.
¿Ustedes observan de parte del ministerio una animosidad hacia el gremio?
-Advertimos una clara intención confrontativa de Rébola, que cree que ganará réditos políticos. Insisto: tenemos propuestas para todo, menos para el ajuste.
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La Ciudad
