Aunque festivales folclóricos hay todo el año, aún en las más remotas poblaciones de cualquier provincia argentina, el lugar común indica que el verano es el período en el que reflorece la música folclórica.
La idea deriva quizás del hecho de que los festivales más reconocidos del país se desarrollan en esos meses y son a su vez los que cuentan con el mayor apoyo de la prensa y la publicidad, a lo que se suma, como en el caso de Cosquín, el hecho de representar algo así como el termómetro del gusto popular a la hora de lanzar productos discográficos del género.
Al margen de cualquier consideración artística, la inmensa mayoría de los festivales y fiestas populares existentes en nuestro país, con la salvedad quizás de algunos encuentros emparentados con cuestiones relativas a la religiosidad, nacieron más como iniciativas destinadas a promover el turismo o alguna actividad característica de la región donde se realiza que para satisfacer necesidades culturales específicas, lo que no quita que se conviertan en un espacio indispensable para mostrar esas mismas manifestaciones.
Esta semana que finaliza marcó el comienzo de algunos festivales, entre los que se destaca, por su trascendencia mediática, el de Doma y Folclore de Jesús María. La fiesta, una de las más prolongadas, ya que supera por un día a las nueve lunas de Cosquín, es considerada -entre los festivales grandes-, como una de las mejores organizadas. Sus objetivos son la recaudación de fondos para escuelas de esa localidad y se caracteriza por dirigir parejamente la atención de los espectadores tanto a los espectáculos musicales que se desarrollan en el escenario como a la competencia de doma (que el que sabe le llama jineteada, según José Larralde).
La presión sobre Jesús María
Jesús María, que inició anoche su nueva edición con las actuaciones Los Tucu Tucu, Los Quilla Huasi y Markama entre otros, como segundo festival más importante de la temporada, cayó involuntariamente en la ola de presiones, especulaciones y dimes y diretes que siempre preceden a la realización del llamado festival mayor de Cosquín, al difundirse la intención de Julio Mahárbiz, Palito Ortega, Norberto Baccón y la Comisión Municipal de Folclore de Cosquín de imponer una cláusula de exclusividad de actuación de los artistas que les impediría presentarse en ambos escenarios.
Aunque las fechas de ambos encuentros no se superponen, la polémica se desató e incluyó a los realizadores de otros encuentros similares que se realizan en la provincia de Córdoba, que pidieron explicaciones incluso al gobierno provincial.
Mahárbiz, la cara visible del encuentro, tuvo que salir entonces al cruce indicando que la exclusividad artística es con Eduardo Falú, Ariel Ramírez, Luis Landriscina y Jaime Torres, que no se presentan desde hace años en Cosquín ni en otro escenario.
El programa de Jesús María contempla en el plano artístico, y citando sólo a las figuras reconocidas de nivel nacional, las actuaciones para esta noche del Dúo Coplanacu, Los ex Fronterizos, Horacio Banegas, Vale 4 y El Mariachi Venus. Mañana estarán Cuti y Roberto Carabajal, Amboé, el Trío San Javier y Ricardo Chiqui Pereyra; el lunes, Los 4 de Córdoba, Luciano Pereyra y Los Yupanqui, y el martes lo harán El Chaqueño Palavecino, el Conjunto Ivotí y Los Sauzales.
El miércoles actuarán Jairo, Los de Alberdi y Tamara Castro, mientras que el jueves le tocará el turno a León Gieco con Víctor Heredia, Facundo Toro, y Los Amigos, y el viernes 12 lo harán Los Carabajal, Abel Pintos, La Chacarerata Santiagueña, Mario Alvarez Quiroga y Los Guaraníes.
El sábado 13 cantarán Teresa Parodi, Los Cantores del Alba, Los Manseros Santiagueños y Las Voces de Orán, y el domingo 14 cerrarán Mercedes Sosa, Los Sacha y Gustavo Patiño, entre otros.
La actuación de Mercedes Sosa en el cierre del Festival de Doma y Folclore de Jesús María, puso un condimento al bastante inflado enfrentamiento entre este encuentro y el de Cosquín. La cantante tucumana, nacida a la fama hace muchos años en el escenario de la plaza Próspero Molina, gracias al generoso gesto de Jorge Cafrune que la invitó a cantar y hasta le compró todos los ejemplares de sus primeros discos para ayudarla, mantuvo desde el retorno de la democracia al país una relación sumamente conflictiva, que año tras año se expresó en cada vez más explosivas declaraciones, antes e incluso durante las lunas coscoínas.
Caras y necesidades repetidas
También se iniciaron ayer otros festivales en distintos puntos del país, entre ellos la Fiesta de la Calle Angosta en la ciudad puntana de Villa Mercedes, y el festival de la chacarera, obviamente en la capital de la provincia de Santiago del Estero.
La reunión de Villa Mercedes se lleva a cabo precisamente en la calle que popularizó en una cueca José Adimanto Zabala y cada velada dura cuatro horas. Por el escenario Alfonso y Zabala, así llamado en homenaje al dúo folclórico más famoso de la provincia de San Luis, pasarán Los Tekis, Soledad, Los Alonsitos, Luciano Pereyra, Abel Pintos, Los de Salta, Yaco Monti, Los del Solar, Zamba Quipildor, Horacio Guarany y Silvia Zabala, entre otros.
También actuarán figuras del poco difundido folclore cuyano como Mercedes Tango, Nacencia, Silvia Gabriela, Las Voces del Chorrillero, Enrique Espinosa, Los Cantores del Manantial, Los Trovadores de Chile, Santiago Altamirano, Renacer 4, Los Arrieros Puntanos, Pocho Mercau y el Dúo Coplero, Raúl Montenegro y los ballets: Tanguito, Lucio V. Mansilla, Folclórico Argentino El Cielito y el ballet Jacinto Piedra.
El Festival de La Chacarera, en Santiago del Estero se desarrolla en el escenario del estadio del Club Unión de Santiago, y es como su nombre lo indica un encuentro en el que participan los cultores más famosos de ese género aunque da cabida a valores poco difundidos. La iniciativa de este festival fue de quien es considerado hoy el padre de la chacarera, don Carlos Carabajal y en el mismo se presentan esta noche Cuti y Roberto Carabajal, Mario Alvarez Quiroga y Raly Barrionuevo, culminando el domingo con la participación de Horacio Banegas, Carlos Carabajal, Los Sachas y Los del Río, entre otros.
También hoy se inicia en la ciudad bonaerense de San Pedro la Fiesta del Durazno, que se desarrolla en en anfiteatro municipal ubicado en las barrancas del Paraná. Por el escenario pasarán los ganadores del pre-festival, el Ballet Paraná de San Pedro, Marcela Morelo, el humorista Mudo Esperanza, Amboé, Víctor Heredia y León Gieco, mientras que el domingo lo harán los ganadores del pre-festival, el Ballet La Fortinera de San Pedro, Hugo Marcel, el humorista Chaguanco, Roxana Carabajal, Los Tekis y cierra Soledad.
Que la música folclórica reverdece en verano puede resultar un lugar común, pero la omnipresencia de algunos nombres en todos los escenarios no habla sólo de la voluntad de verlos del público o de la vocación por expresarse de los artistas, sino además de un poderoso aparato de compra y venta de espectáculos que está en manos de unos pocos empresarios.
Los festivales folclóricos en general, y los veraniegos en particular, suelen estar tan atravesados por cuestiones extra artísticas que los condicionan en muchos aspectos, sin contar el hecho de que más del 90 por ciento de lo que ofrecen esos encuentros no es folclore en el sentido más estricto de la palabra, o directamente incluye géneros que le son totalmente ajenos.
Muchos de ellos incluyen expresamente un costado competitivo destinado a la promoción de nuevas figuras -el ejemplo por antonomasia de esto es Cosquín con su Pre Cosquín que se desarrolla días antes del Festival Mayor y todos los pre-pre Cosquines que se organizan en todo el pais, llegándose a crear en un envidiable mecanismo democrático, subsedes de las subsedes-. Pero la paradoja consiste en que sólo los consagrados convocan público, lo que no siempre se concilia ni con la calidad ni con el ofrecimiento de nuevas propuestas.