Devuelven a un matrimonio de Mar del Plata el bebé que compraron en Rosario

Se comprobó que la pareja era ajena a la maniobra. Hay tres procesados y se descartó la existencia de una banda

El juez de menores Jorge Cartelle restituyó a un matrimonio bonaerense el bebé que la pareja había comprado en Rosario y que las Tropas de Operaciones Especiales trajeron desde Mar del Plata en julio pasado, cuando se descubrió la operación. La medida se produjo luego de que los padres adoptivos fueran desvinculados de la causa penal por la venta del niño, al comprobarse que habían sido engañados y que no sabían que el trámite fue ilegal. El nene se encuentra desde hace una semana bajo la custodia provisoria de la pareja, que ahora deberá completar el trámite formal de adopción para recuperar definitivamente al pequeño.
El bebé, de nombre Salvador y de 9 meses de edad, fue traído a Rosario junto con sus padres en julio, cuando las TOE sospechaban que en la venta del pequeño había operado una supuesta red de compraventa de recién nacidos con conexión en varias provincias.
Sin embargo, la investigación judicial descartó la existencia de una banda organizada que comercializara niños. Tres mujeres fueron procesadas por actuar como nexos en la comercialización del pequeño en el juzgado de Instrucción número 2, a cargo de Alejandra Rodenas.
Las imputadas, María Angélica Flores de Espinosa, Santa Luna de Zuchi y la hermana de la mujer marplatense, Adriana D'Ambrosio, fueron procesadas por intermediación prohibida. En tanto, la jueza desvinculó a los padres adoptivos al comprobar que éstos fueron engañados. La pareja creía que el dinero que había aportado -unos 3 mil pesos- era para gastos del parto.
Gracias a que fueron desligados de la causa, los padres adoptivos podrán recuperar al pequeño, que durante cinco meses estuvo en un hogar de tránsito. Ahora permanecerá bajo custodia de la pareja marplatense hasta tanto el juez autorice la guardia preadoptiva. Para ello, la pareja deberá cumplir con la documentación requerida. El tribunal cuenta con seis meses para determinar la viabilidad de la guarda preadoptiva.
La entrega provisoria pudo cumplirse una vez que se estableció la maternidad de la criatura. El niño y su madre biológica fueron sometidos a un examen genético y la mujer autorizó formalmente la adopción. También ella fue separada de la causa penal, ya que había entregado al niño voluntariamente y sin objetivos económicos.
Lo importante es considerar el interés superior del niño y resguardar los intereses afectivos de la criatura, teniendo en cuenta que la pareja lo tuvo los primeros cinco meses de su vida, afirmó el juez Cartelle. La medida registra escasos antecedentes: pocas veces se restituyeron niños que no habían sido inscriptos en los registros de adopción.