Año CXXXIV
 Nº 48983
Rosario,
sábado  30 de
diciembre de 2000
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El rector de la UNR opina sobre el tema del ingreso
Ricardo Suárez: "A la universidad deben entrar todos los alumnos hábiles"
Contradictorio, Suárez defiende que los estudiantes accedan libremente, pero con un esfuerzo superior

Laura Vilche

Quien ingresa a la universidad debe estar preparado para hacer un esfuerzo superior, dijo el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Ricardo Suárez, al dialogar con La Capital sobre la política de ingreso a las casas de estudio. Un tema por demás de polémico que resurgió la semana pasada en la Facultad de Derecho. Allí el decano propuso que los aspirantes rindan a partir del 2001 un examen que defina el cursado al primer año como regular o libre, y se armó un escándalo. Suárez reconoció que el tema es complejo, y a pesar de que cometió un lapsus al decir que cada carrera debería definir su propio examen de ingreso, rápidamente se retractó y subrayó: Creo que a la universidad pública deben entrar todos los estudiantes que demuestren ser hábiles.
También habló de la competencia de la UNR con las universidades privadas sobre las que opinó que no tienen la excelencia académica de las públicas. Y, cuando se le preguntó si no era contradictorio que la UNR mantuviera el ingreso libre, mientras sus escuelas (Politécnico y Superior) sostienen desde hace años el examen y el cupo, dijo: Allí los alumnos invierten mucho dinero al prepararse para ingresar. Y si no entran pueden ir a otro colegio público. Nosotros, en cambio, somos la única universidad con estas características, no podemos ser elitistas.
-¿Por qué si muchos sostienen que las aulas están superpobladas y que es imposible enseñar y aprender en esas condiciones es tan difícil debatir el ingreso en la universidad? ¿Por qué cuesta tanto hablar de examen de ingreso?
-Bueno el tema es complejo y en Derecho no hubo un debate sobre un examen de ingreso, sino sobre la modalidad de cursado de las materias de primer año...
-¿Le parece que existió ese debate?
-En realidad tengo mucho para opinar sobre ese tema y ese proyecto presentado por el decanato, pero por ahora no quiero expresarme porque las cosas se tranquilizaron dentro de la facultad y considero que es allí donde, en principio, debe darse la discusión.
-Está bien, no hablemos de Derecho, pero sí de Ciencias Económicas y de Medicina donde las aulas de primer año están saturadas de estudiantes...
-Están así durante el primer cuatrimestre. Luego la asistencia del alumnado disminuye. Creo que cada facultad, es más, cada carrera debería tener su propio examen de ingreso (sic). No, perdón, su propio régimen que contemple las modalidades de las carreras.
-¿Qué opina usted concretamente del examen de ingreso?
-Mire, durante el 91 y el 92, la Facultad de Ciencias Económicas y la Dirección de Estadísticas de la Universidad hicieron un estudio profundo sobre el rendimiento de alumnos que ingresaron en el 79 con examen y en el 85 sin evaluación. Encontraron resultados similares. Que el 9 por ciento seguía estudiando, que un 42 por ciento se había recibido y que un 49 por ciento había abandonado.
-¿Moraleja?
-No se encontró que el rigor de un examen de ingreso traía como consecuencia una mejora posterior en el rendimiento. Por eso siempre digo que hay que apuntar a un ingreso responsable. El alumno firma al ingresar una especie de contrato que le generará derechos y obligaciones durante el cursado de su carrera. Pero esto supone que son hábiles, supone que los contratantes son personas hábiles.
-¿Y cómo propone usted comprobar esa habilidad?
-Desde el 99 realizamos un trabajo con alumnos y docentes de escuelas medias, oficiales y privadas, y un grupo numeroso de docentes universitarios, del primer año de casi todas las facultades. Se hicieron talleres que apuntan a la orientación vocacional y a la enseñanza de técnicas de estudio.
-Definitivamente para usted deben entrar todos los aspirantes...
-Todos, pero preparados.
-¿Por qué no se defiende el ingreso libre con el mismo rigor en el Politécnico y el Superior?
-El cupo allí obedece a una cuestión estrictamente pedagógica. Además si ingresaran todos los chicos no se podría dar clases. No habría espacio físico...
-¿Y la universidad está preparada física y humanamente para enseñar a tantos alumnos? ¿Podría pensarse, por ejemplo, en que en estas dos escuelas cursen los primeros cien alumnos que se anotan?
-Creo que no habría ningún problema.-...Padres, docentes y alumnos sostienen que el examen ha contribuido tradicionalmente a la excelencia educativa de ambos establecimientos.
-La mayoría de los chicos, que intentan ingresar al Poli y al Superior se preparan y gastan un dineral. Si hiciéramos eso en la universidad entrarían sólo los que tienen dinero. Además, allí quien no ingresa puede ir a otra escuela secundaria oficial. Limitar el ingreso en la universidad es ir en favor de la elitización de la educación.
-¿Hoy no hay elitización en la universidad?
-No hay que contemplar sólo la realidad de Rosario o de Buenos Aires. Muchos alumnos de Salta, San Luis y Catamarca comen por única vez al día en los comedores de la universidad.
-¿La universidad pública no se está dando un lujo? ¿No cree que de seguir así puede perder calidad académica y que en la pulseada ganarán las privadas?
-No se ha demostrado que la universidad pública sea peor que la privada.



"La universidad pública no es peor que la privada".
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