Reutemann: la Nación es la que debe empezar a bajar impuestos

La eliminación de impuestos es una medida positiva, pero me da la impresión de que el gobierno nacional también tendría que empezar, antes que por las provincias, en bajar el IVA y también en la evasión. Así respondió ayer el gobernador Carlos Reutemann al ser consultado sobre la intención del gobierno nacional de presionar a los Estados provinciales para que eliminen los impuestos distorsivos, fundamentalmente ingresos brutos y sellos. Y agregó que el gobierno nacional insiste mucho con las provincias pero -frente a las cifras de déficit de este año y el 2001- estamos viendo que el ajuste no lo hace.
Reutemann asistirá hoy a una reunión en Olivos convocada por el presidente Fernando de la Rúa, junto al resto de los mandatarios provinciales. En el encuentro De la Rúa les explicará los beneficios del plan de obras de infraestructura y a la vez comenzar a negociar un acuerdo político para que en los próximos meses se llegue a una acuerdo para una reforma fiscal de envergadura.
Ayer en Rosario, Reutemann indicó que el gobierno nacional estaría pensando en disminuir algunos impuestos distorsivos. Recordó que esa idea ya se barajó durante la gestión de Domingo Cavallo al frente del Ministerio de Economía: Yo ya lo escuché en el año 93, era la eliminación de impuestos distorsivos como ingresos brutos y sellos, pero cuando el IVA estaba al 16%.
Pero ahora la alícuota del IVA no es la misma. El gobernador insistió en que siempre se habló cuando estaba al 16% de derogar estos impuestos creando un IVA provincial, o un IVA mochila como se le dijo en aquella época. Pero remarcó que cuando el IVA se fue al 21%, se alejó toda la posibilidad de volver a agregar otro IVA provincial que era difícil de instrumentar.
Reutemann conjeturó que ahora, quizás el gobierno nacional esté pensando que quiere bajar el IVA al 12% ó al 13% y que se vuelva a reflotar lo que se habló allá por el año 93, nada más.
Hoy, y durante los próximos tres meses, De la Rúa tratará de obtener un acuerdo con los gobernadores para alcanzar una reforma fiscal, que incluye una mayor eficacia recaudatoria. A la vez, el gobierno tratará de poner un freno a las habituales moratorias en las provincias, algo que ya se comprometió a hacer a nivel nacional en la carta intención firmada con el Fondo Monetario.