Franja de Gaza.- Los palestinos expresaron ayer su pesimismo sobre las perspectivas de las conversaciones de paz, mientras en el funeral de la última víctima palestina de los enfrentamientos fue quemada una bandera israelí y se efectuaron disparos al aire en medio de expresiones amenazantes. La última ola de violencia en la región ha dejado un saldo de 344 muertos, en su mayor parte palestinos. El gobierno israelí se inclina aún hacia una solución militar, con sus diarios crímenes contra nuestro pueblo, sostiene una declaración emitida ayer por el Gabinete del líder palestino Yasser Arafat. Los dirigentes palestinos no ven ningún cambio serio en las posiciones israelíes en las conversaciones de paz de Washington, añadió. Un delegado palestino en las conversaciones de Washington acusó anteayer a Israel de retirar una oferta de transacción sobre la espinosa cuestión de Jerusalén. Israel lo negó. El Gabinete palestino también dice que en las conversaciones de Washington las partes continúan muy distantes en cuanto a la cuestión de los refugiados. Los palestinos exigen que los que fueron expulsados o huyeron de Israel, y sus descendientes -actualmente varios millones-, puedan retornar a sus lugares de origen. Israel lo rechazó de plano. Aún demandamos firmemente el retorno de los refugiados palestinos. Es un derecho sagrado, se sostiene en el documento. En Rafah, al sur de la franja de Gaza, unas tres mil personas acudieron al funeral de un funcionario de defensa civil muerto de un disparo mientras pasaba en una autobomba frente a un puesto militar israelí. El ejército israelí dijo que los soldados, que custodiaban un asentamiento judío, consideraron que el vehículo era una amenaza. Muchos de los asistentes al funeral representaban al grupo Guerra Santa (Jihad) Islámica, que se opone a las conversaciones de Washington como a todo acuerdo con Israel. Jihad Islámica promete que en venganza por los heridos y los mártires habrá una operación militar que pondrá el temor a Dios ante el enemigo, dijo un activista. En la ciudad cisjordana de Hebron, unos 1.500 palestinos marcharon en una procesión fúnebre por un adolescente palestino muerto anteayer en un choque con fuerzas israelíes. Después estalló una pedrea.
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